La plantilla del Elche ha aceptado esta temporada aplazar el12% del cobro de su salarios para la próxima temporada con el fin de pudieran ser inscritos Enzo Roco, Cristian Herrera y Víctor Rodríguez. Pero ese gesto, que tantos halagos ha recibido, es sólo un paso más del grado de compromiso que los jugadores franjiverdes, especialmente los que más tiempo llevan en el club, están demostrando durante los últimos años.
No es la primera vez que los futbolistas han aceptado aplazar cobros y retrasos en las nóminas. Este mismo verano ya ha habido hasta tres ocasiones en los que han colaborado con la entidad. Primero asumieron recibir los 2,2 millones de la prima por la permanencia en Primera División en el mes de enero, cuando la podían haber exigido el 30 de junio. Luego ha llegado el aplazamiento del 12% de los salarios y, además, cobraron la nómina del mes de julio el pasado 27 de agosto.
Al final de la campaña pasada, cuando tocaba el turno de hacer las liquidaciones de la temporada, los futbolistas también asumieron recibir la nómina de junio y una que quedaba pendiente de enero el 15 de julio. De esta forma evitaron que el Elche tuviera denuncias ante la AFE y pudiera realizar fichajes. Desde la plantilla, y principalmente los capitanes, siempre se ha entendido que la situación económica del fútbol español no es muy boyante que digamos y en todos los equipos hay dificultades.
Uno de los momentos más críticos de las últimas temporadas fue a principio de año. Los jugadores tenían pagarés a cobrar el 30 de diciembre de 2013 de los 4 millones de la prima del ascenso -salían a unos 115.000 euros por cabeza- pero el club no pudo hacer frente a esa importante cantidad de dinero en la fecha estipulada.
Tras una reunión con la plantilla, en la que también estuvo presente el vicepresidente de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE), Luis Gil, los jugadores accedieron a cobrar en dos plazos: uno, el 20 de enero, y el otro, el 15 de febrero. De esta forma, permitían al club ilicitano acudir al mercado de invierno en el que fichó a Garry Rodrigues, quien a la postre logró un gol vital para la permanencia en Málaga.
Pero el Elche también tuvo problemas para liquidar el pago de la prima en las fechas estipuladas, aunque al final el retraso fue muy poco y antes de que finalizase el mes de febrero ya había recibido todas las cantidades. Pero eso supuso aplazar la nómina de enero que se cobró finalmente en julio.
También ha habido futbolistas que han aplazado la liquidación de sus fichas de junio a diciembre.
Los capitanes siempre han entendido que la situación económica es muy complicada y que el Elche necesitaba de su colaboración para poder seguir funcionando.
A pesar de los aplazamientos, la entidad, hasta la fecha, siempre ha cumplido, con más o menos retraso, y esa es la garantía que tiene la plantilla que, tarde o temprano, siempre ha terminado cobrando. De ahí a que, una vez más, haya mostrado su solidaridad y grado de compromiso con el club.
