Fran Escribá quedó ayer en estado de alerta. Domingo Cisma, el único lateral izquierdo específico disponible de la plantilla, sufre una sobrecarga en el gemelo y ayer no pudo finalizar el entrenamiento. El futbolista andaluz abandonó el estadio Martínez Valero junto al fisioterapeuta Fran Martínez para tratarse y realizarse unas pruebas.

En principio parece que no es nada grave y que puede llegar a tiempo para poder jugar el sábado frente al Granada, aunque el propio jugador comentó que tenía molestias y que no las tenía todas consigo. Su disponibilidad va a depender de la evolución que tenga entre hoy y mañana.

En caso de no poder jugar, el entrenador del Elche tendría un serio problema porque el otro lateral izquierdo de la plantilla como es Edu Albacar se encuentra lesionado de su tobillo derecho y todavía tardará, como mínimo, más de un mes en volver a los terrenos de juego.

En caso de que Domingo Cisma no pueda recuperarse a tiempo, Escribá tendría dos alternativas: adaptar al uruguayo Damián Suárez a la banda izquierda y situar al rumano Sapunaru en la derecha o bien echar mano de Marín, el lateral izquierdo del filial, que está completando una buena temporada en Segunda División B.

Por otro lado, el guardameta Manu Herrera tampoco entrenó ayer con el grupo debido a la sobrecarga que padece en el recto anterior y estuvo realizando ejercicios de recuperación con los fisioterapeutas. El portero madrileño arrastra molestias musculares, pero hoy jueves tiene previsto reincorporarse al trabajo junto al resto de sus compañeros y no tendrá problemas para defender la portería franjiverde en el estadio de Los Cármenes.

Por su parte, Aarón ya se encuentra prácticamente al cien por cien tras más de tres semanas en el dique seco por problemas musculares y esta semana estará a disposición de Escribá para poder entrar en la convocatoria. Carles Gil también entrenó bien.