El Elche pretende tener un estadio de cinco estrellas y con esa idea ha puesto en marcha la remodelación del coliseo franjiverde que se inauguró hace 37 años y que durante todo ese período no había sufrido ninguna variación que fuera destacable. La primera fase del proyecto está centrada en la fachada exterior, zona de vestuarios, cabinas o sala de prensa o torres de evacuación, entre otros. "Se pretende adecuar el campo a la nueva normativa de 2013 para que la seguridad sea total", señaló ayer el consejero Paco Sánchez, que junto al presidente del club, José Sepulcre, y al arquitecto de las obras, José Manuel Sánchez Serrano estuvieron en la presentación del proyecto. Se desea que el estadio sea "moderno y funcional", confesó Sepulcre.

En la planta baja existe una entrada que dará acceso al gimnasio, a los vestuarios, visitante y local, al despacho del entrenador, al de control de doping y del cuerpo médico, a la sala de Prensa y a la zona mixta.

En la primera planta estarán las oficinas. A mano izquierda, presidencia, gerencia y sala de juntas, administración y departamento jurídico. Y a la derecha, todo el tema del control de la seguridad y organización interna del club a nivel de comunicación y marketing. En la segunda planta se colocará la cafetería, el palco y los nuevos palcos Vips cerrados. La cafetería será un gran balcón que mira a la ciudad y también es una atalaya desde la que se ve el campo de fútbol. Se desarrollarán 22 palcos, existiendo la posibilidad de llegar a 36, en función de la demanda existente. Por último, en el anillo superior, se situarán las 30 cabinas de prensa, accesibles a través de ascensores privados desde la zona mixta y sala de Prensa.

La fachada principal que se va a hacer ahora quedará "digna" y posteriormente quedará integrada dentro de una fase posterior que se pretende realizar "si se dan las condiciones favorables y la disponibilidad económica del momento acompaña", según palabras del arquitecto José Manuel Sánchez Serrano.

Segunda fase

Está previsto, que en esa segunda intervención, el Martínez Valero quede recubierto por una malla metálica microperforada de deployé que le dará un aspecto más moderno. Se pretende que el estadio proyecte una imagen de poderío y para ello también se recubrirá con una pérgola la zona de los bajos del estadio para facilitar el tránsito de los aficionados y que haga más agradable el entorno.

Por otro lado, Paco Sánchez confirmó que pronto se comenzará con la remodelación de aseos, butacas, zona de emergencia y de minusválidos y la citada tarea se adjudicará la próxima semana. El Martínez Valero cuenta con 35.707 butacas y con la remodelación van a desaparecer entre mil y dos mil, sobre todo en el anillo superior debido a las actuaciones que se van a realizar en las escaleras y al espacio que ocuparán las nuevas cabinas de Prensa.