José Bordalás, entrenador del Elche, ha reconocido hoy que está preocupado por el hecho de que todavía no haya llegado el delantero que se busca y que le gustaría tener la plantilla cerrada para poder "trabajar con todos".

El entrenador alicantino ha reconocido que el Elche no es un club que "pueda fichar lo que quiere", porque "tiene limitaciones presupuestarias" y por ese motivo, no pueden equivocarse.

Con respecto a los refuerzos para la próxima temporada, Bordalás ha dicho que les conocían y sabían el rendimiento que pueden dar. "Confiamos en que hagan una buena temporada", dijo.

"De momento no podemos fichar al delantero que quisiéramos. Nos gustarían Rubén Castro y Jorge Molina, pero no tenemos presupuesto para eso, por lo que hay que amoldarse a las circunstancias", añadió.

Bordalás no quiere que se levanten falsas expectativas y aboga por seguir trabajando "con humildad" y sin cambiar su filosofía ya que, según el técnico ilicitano, la Segunda División es una categoría en la que un año quedas cuarto o quinto y al siguiente peleas por no bajar.

"Tenemos un buen grupo y gente con ganas de trabajar y hacer bien las cosas, que tiene ganas de ilusionar desde el principio, pero desde la humildad", añadió el entrenador del Elche, quien, por otra parte, no se ha pronunciado sobre los cuatro jugadores que están a prueba. "No es una situación fácil para ellos", indicó.

"No hay que hacer muchos fichajes, pero si en puestos importantes", concluyó el entrenador del Elche, que, además de un delantero, espera a un hombre de banda izquierda.