Este Elche huele a algo grande. Los ilicitanos pudieron complicarse ayer su clasificación para las eliminatorias por el ascenso, pero, de nuevo, las ganas, la ambición y porque no, también la dosis de suerte necesaria, salieron a relucir cuando peor tenían las cosas. A falta de menos de cinco minutos para la conclusión el partido, el conjunto franjiverde perdía y Balaídos celebraba una victoria, que prácticamente le dejaba en la promoción de ascenso. Pero fue entonces cuando Ángel empató el encuentro, silenciando el estadio gallego y dejando al Elche a las puertas de un "play off", que puede asegurar hoy si el Xerez no es capaz de ganar en Vallecas al Rayo.

Bordalás volvió a su once clásico de hace algunas jornadas. David Sánchez se quedó inicialmente en el banquillo, lo que propició que Kike Mateo regresara a la posición de mediapunta y Cristóbal ocupara la banda izquierda. Otra de las incógnitas que había era quién iba a ser el sustituto del lesionados Pelegrín. El técnico franjiverde se decidió por Etxeita.

Los ilicitanos salieron como siempre: bien plantados en el terreno de juego e intentado ahogar a su rival en su campo a base de presión. Y a los dos minutos, la dinámica del choque pudo cambiar. Ángel se iba solo hacia la meta de Yoel y fue trabado por Tuñez en la frontal del área sin que el árbitro le mostrase una tarjeta muy clara.

El Celta aprovechó algunas indecisiones de la defensa franjiverde y De Lucas, primero; y Cristian Bustos, después, obligaron a intervenir a Jaime. A partir del cuarto de hora de juego, el encuentro entró en un intercambio de golpes en el que los gallegos tuvieron más presencia en el área debido a que Trashorras y Cristian Bustos comenzaron a entrar en contacto con el balón y a enlazar con De Lucas y David Rodríguez.

A pesar de la ligera mejoría local, fue el Elche el que tuvo la mejor oportunidad para adelantarse en el marcador. Un centro desde la banda derecha de Kike Mateo no lo aprovecho Cristóbal, cuyo remate de cabeza se fue ligeramente por encima del larguero de la meta de Yoel (m. 18).

Pero el conjunto vigués fue metiendo, poco a poco, a los ilicitanos en su área. Y tanto fue el cántaro a la fuente que, en el minuto 32, Tuñez, le ganó la partida a Héctor Verdés y aprovechó un perfecto centro de Kike De Lucas para adelantar a su equipo (1-0).

Con el marcador en contra, al conjunto de Bordalás le tocó nadar contracorriente. Y el empate no tardó en llegar. Sólo cuatro minutos después, Cristóbal sacó provecho de un rechace después de una buena jugada de Kike Mateo (m. 36 1-1). La igualada tan rápida la acusó el Celta y provocó cierto nerviosismo en la grada.

La segunda parte comenzó con susto en la portería franjiverde. De Lucas se plantó sólo ante Jaime, pero su remate se fue demasiado desviado.

El encuentro entró en una dinámica en la que ninguno de los dos equipos fue capaz de hacer daño a las defensas rivales. El primero en mover ficha fue Bordalás, que dio entrada a Ripa para ayudar a Edu Albacar a tapar la banda izquierda porque los gallegos jugaban con tres centrales y dos laterales adelantados.

Pero curiosamente, cuando menos peligro estaba creando el Celta, Trashorras conectó con David Rodríguez, que le dejó el balón a placer para que De Lucas lo mandara al fondo de la red (2-1, m. 63).

A partir de ese momento, al Elche tuvo que irse obligatoriamente hacia arriba. Con el marcador en contra, Bordalás recurrió a su revulsivo particular como es David Sánchez, pero en esta ocasión, el centrocampista sevillano no entró mucho en contacto con el balón. Con el marcador favorable y la grada empujando, los locales se dedicaron a intentar mantener el resultado e iban camino de conseguirlo.

Cuando parecía que la victoria se iba a quedar en Balaídos, en el minuto 86 apareció Ángel, para elevarse, a pesar de su pequeña estatura, y rematar al fondo de la red un centro de Generelo. Balaídos no se lo podía creer y Elche es ya hoy equipo de "play off" de ascenso a Primera División tras perder el Xerez ante el Rayo Vallecano.