El Elche se ha hecho fuerte en su estadio y ha convertido el estadio Martínez Valero en un auténtico fortín desde que el 5 de febrero caía ante los suyos frente al Cartagena por 1-2. Al finalizar aquel encuentro los ilicitanos ocupaban el puesto doce en la tabla y estaban a 17 puntos del tercer clasificado y a seis de la promoción, que en aquel momento marcaba el equipo departamental.

Desde el entonces, la reacción franjiverde ha sido tremenda, prueba de ello es que a falta de cinco jornadas para finalizar la competición regular la escuadra franjiverde está situada a un punto del Celta, que ahora es tercero, y se encuentra metida dentro del "play off" de ascenso con seis puntos de margen sobre el Xerez, primer equipo que está fuera del grupo de los cuatro equipos que al final de Liga jugarán entre ellos por ganarse una plaza en la máxima categoría.

Esta reacción ilicitana se ha cimentado en el estadio Martínez Valero donde los dirigidos por José Bordalás han ganado los siete partidos que han disputado ante sus seguidores. Comenzaron su andadura con el Barcelona B (2-1) y siguieron su trayectoria inmaculada ante Numancia (1-0), Córdoba (2-1), Tenerife (1-0), Nàstic (1-0), Huesca (3-0) y Alcorcón (1-0). Es decir, ha sumado todos los puntos posibles, 21, después de hacer 11 goles y recibir sólo dos.

Una marca histórica

Hay que remontarse a las temporada 94-95 para encontrar una serie igual de victorias en casa de forma consecutiva. En aquella ocasión, con el equipo en Segunda División B, superó de forma seguida a Benidorm (1-0), Nàstic (2-0), Gramanet (2-0), Europa (1-0), Murcia (1-0), Girona (2-0) y Sabadell (6-2).

En Segunda División, la última vez que los ilicitanos ganaron siete partidos seguidos fue en la 87-88. En esa campaña, de la mano de Felipe Mesones, lograron el ascenso a la máxima categoría del fútbol español, y el Elche sumó ocho partidos ganando uno tras otro. Barcelona Atlético (3-0), Castellón (2-0), Bilbao Atlético (2-0), Sestao (1-0), Recreativo (2-0), Xerez (3-0), Hércules (3-1) y Granada (1-0) fueron sus víctimas en aquella campaña histórica que ahora se intenta repetir. Fue la última vez que la entidad ilicitana vivió un ascenso a Primera División.

El récord de triunfos de forma consecutiva el Elche lo tiene en 18. Sucedió en la temporada 56-57, con el equipo en Tercera División. Los ilicitanos ganaron los 17 partidos de Liga y el de la primera eliminatoria de ascenso. La mejor marca en Segunda División se produjo en la 71-72, con 12 partidos seguidos con victorias. En la categoría de plata también sumó nueve en la 79-80, los últimos de esa Liga, y en la 83-84, campaña en la que también se logró el ascenso a Primera con Roque Olsen en el banquillo.

El equipo desea seguir la actual trayectoria y tiene por delante dos encuentros, ante Villarreal B y Xerez para terminar la Liga ganando en el en el Martínez Valero nueve partidos seguidos. Luego, llegará la promoción, pero eso ya es otra historia. Primero hay que ganarse el billete y para ello los seis puntos que deben disputarse en el coliseo franjiverde pueden valer.