El ex jugador del Elche, Jorge Molina, recibió ayer en el hotel Ritz de Madrid los galardones al máximo goleador de la categoría de plata y máximo goleador nacional. Es decir, los trofeos "Pichichi" y "Zarra" respectivamente. El delantero alcoyano tuvo la oportunidad de codearse con las principales figuras de Primera y Segunda División de la última temporada. No hay que olvidar que Leo Messi se llevó el galardón de máximo realizador de Primera, Pep Guardiola el del mejor entrenador y el trofeo "Zamora", al portero menos batido, fue para Víctor Valdés, El premio al juego limpio "Puerta-Jarque" fue para el portero del Athletic de Bilbao Gorka Iraizoz y el ex defensa del Deportivo de la Coruña Filipe Luis.

"No todos los días tiene uno la oportunidad de estar al lado de este elenco de futbolistas y la verdad es que uno se siente acomplejado al lado de ellos. Me ha tocado estar en la mesa junto a Iraizoz y ex jugador del Real Madrid Emilio Butragueño. Nunca había visto tanta gente de fútbol reunida alrededor de un acto", comentaba ayer por la tarde Jorge Molina mientras regresaba a Sevilla junto a su mujer.

El delantero de Alcoy no escondía que "éste es un premio individual, pero tengo claro que si no hubiese sido por mis compañeros yo no lo hubiera conseguido. Estoy muy orgulloso de representar a una entidad como el Elche y este Pichichi se lo dedico a ella y a todos mis compañeros de la temporada pasada. Ellos lo dieron todo para que yo consiguiera marcar más goles que Stuani y Toché. Nunca olvidaré mi paso por el Elche mientras viva".

Como se recordará, Jorge Molina es el primer "Pichichi" franjiverde de Segunda División. Vavá lo consiguió en Primera en la campaña 1958-1959 con 19 goles.

El actual delantero del Betis no sólo logró la pasada campaña ser el máximo goleador de Segunda División, si no que también se erigió en el jugador franjiverde que más goles marcó con el Elche en la categoría de plata en una campaña. Con sus 26 dianas superó a Cardona, que en la 58-59, hizo 23. Por detrás quedan en la historia del club ilicitano Pahuet y Sixto, que en las 58-59 y 87-88, respectivamente, lograron 21.

"La temporada resultó muy completa -proseguía Molina- y la única pega es que al final el equipo no logró el ascenso a Primera División. Hubiera sido ya todo redondo".

Esta temporada todavía no ha mostrado en Sevilla con el Betis su olfato goleador ya que una lesión le ha dejado fuera de la competición en el último mes. "Esta semana ya me voy a meter en el trabajo del grupo y en 15 días espero estar a disposición del entrenador. Veo al equipo muy bien y cada día que pasa estamos más compenetrados".

El alcoyano dice estar "preocupado" por la marcha del Elche y espera que "pronto logre un triunfo".