El consejero delegado del Elche, Juan Carlos Ramírez, confesó ayer al final del partido en Tarragona que "estoy orgullo de mis jugadores. Lo han dado todo en el campo y se han merecido el triunfo. Gracias a las jugadas a balón parado nos han superado, pero no se lo han merecido. La imagen que ha dado el equipo ha sido muy buena y se ha estado en la línea que todos queremos".

Cuando se le preguntó por el cambio de actitud del equipo señaló que "este Elche siempre ha dado la cara durante toda la Liga y estoy muy contento de ello. Algunas veces no han salido las cosas como quisiéramos, pero siempre se ha estado ahí al pie del cañón. Ante el Nàstic se pudo ver que aquí todo el mundo está implicado".

Sobre los cambios en el once de Bordalás señaló que "ha podido sorprender, incluso a mí, pero el técnico tiene la confianza del consejo y la mía personal. Lógicamente, todo lo que hace es por el bien del Elche y hay que seguir para adelante para planificar la temporada que viene. Ahí que continuar con la imagen que tenemos y estoy seguro que el año que viene vamos a dar mucha guerra".

El máximo accionista no cree que los futbolistas que se quedaron en casa como Tena, Raúl Fuster, Paco Esteban y Martí Crespí hayan pagado los platos rotos de lo acontecido dentro del vestuario en la última semana."No es así, porque otras veces son otros los que lo hacen. Pienso que fue una decisión técnica y no hay que darle más vueltas. Yo he visto la alineación cuando estaba en el palco y los que han salido han dado la cara. En su momento, Perera y Generelo no jugaban. La competición es muy larga y ahora les toca a unos ser protagonistas en contraposición a otros".

Por su parte, el presidente, José Sepulcre, señaló sobre las ausencias que "tengo una lectura muy particular de todo, pero nunca jamás me voy a meter en las decisiones de un entrenador. Él es el responsable del equipo, sabe lo que se está jugando y lo que hace. Son decisiones suyas. Las respeto y las apoyo. Si él ha creído que era lo mejor para el club, adelante. Tiene toda nuestra confianza".

Con relación al partido ante el Nàstic señaló que "ha sido una pena que no hayamos podido ganar ya que fuimos muy superiores al rival. En pequeños detalles nos superaron, pero estoy contento de la entrega y lucha de los futbolistas. Fuimos mejor que el rival, pero no estuvimos finos en su área y los goles al final de los partidos son lo que deciden. Ellos lograron tres en un partido donde se jugaban la permanencia".