La maldición amarilla volvió a jugarle una mala pasada a este Elche al que todo le salió anoche al revés en su duelo ante el Villarreal B, con cerca de 33.000 espectadores en la grada. No parece que este color vaya con el equipo franjiverde, ni este tipo de aglomeraciones sean beneficiosas para la salud deportiva del equipo. Si nos remontamos al pasado, ahí está el varapalo sufrido ante el Cádiz, que viste igual, en el mítico partido que todo el mundo recuerda en Elche. Luego, en un "play-off" de ascenso a Segunda División, la UD Las Palmas se llevó el gato al agua de forma escandalosa. Si miramos a esta campaña, más de lo mismo. El conjunto canario ganó en el Martínez Valero y ayer repitió el Villarreal B.
El Elche estuvo enorme en la entrega y de hecho la afición despidió a los suyos con una sonora ovación a pesar del golpe recibido, pero esto es el destino y en esta ocasión se mostró esquivo con los intereses ilicitanos. Quizás el equipo, si hay que poner algún pero, estuvo demasiado acelerado para la ocasión, ante un rival con mucha velocidad y calidad técnica. Pero también es cierto que con muchas menos cosas este Elche ha ganado un gran número de partidos en esta Liga. Ayer no era el día que los dioses habían elegido para que el conjunto franjiverde sumara los tres puntos y, cuando eso sucede, apelar a otras cosas resulta prácticamente una pérdida de tiempo. Se hicieron las cosas mucho mejor que el rival a lo largo de los 90 minutos de juego, pero mientras Juan Carlos lo paró todo, Caballero resbaló en un córner y el balón se coló dentro; el maestro Acciari forzó tanto que fue expulsado y, cuando llegó el empate a dos, el Villarreal B, en posible fuera de juego, hizo el 2-3. Por cierto, lo celebró como si hubiera ganado la Liga de Campeones. Hasta su portero corrió hacia el campo contrario a celebrarlo. Cosas del fútbol.
La primera parte fue un canto a la mala suerte. El Elche llevó en todo momento el control del partido, tuvo las ocasiones de gol en el área de Juan Carlos, hasta diez, pero el Villarreal B sacó córner y Jefferson Montero metió el balón dentro de la portería. El bofetón duró muy pocos minutos ya que el Elche volvió a la carga. Pero el balón se mostro remiso a entrar y para colmo de males, en el tiempo añadido, en una pérdida de balón Marco Rubén, con la ayuda de Ripa, hizo el 0-2.
Nada más comenzar la segunda parte el Elche se quedó con 10 jugadores por la expulsión de Acciari. Pero en el conjunto local nadie bajó los brazos y llegó a empatar el duelo, aunque el 2-2 sólo duró dos minutos, ya que Montero hizo el 2-3 y sentenció el partido. El Elche murió en el área rival dándolo todo en el campo.
El Elche demostró ayer ante 33.000 personas que es un equipo sólido capaz de hacer algo muy grande esta temporada. Hasta los más negativos se pudieron dar cuenta ayer que esto va en serio. Los alérgicos a los grandes llenos comprobaron ante su sorpresa que con esta afición detrás los pupilos de José Bordalás tienen todavía tantas opciones como las de los demás rivales en liza para luchar por algo más en esta Liga, a pesar del traspiés de ayer. Quedan todavía siete partidos por jugar y 21 puntos por disputarse. Este Elche tiene argumentos más que suficientes para luchar con otros trasatlánticos de la categoría como Real Sociedad, Hércules o Betis y lo va a dejar todo en el intento como lo hizo ayer a pesar de las adversidades. La fe mueve montañas y este grupo de futbolistas tiene una confianza en sus posibilidades enorme que adorna con trabajo y humildad. Los Caballero, Samuel, Acciari, Trejo, Molina y compañía quieren imitar a los Miguel, Sánchez, Robi, Bracum, Claudio y Sixto, que precisamente hoy hace 22 años lograron de forma matemática el ascenso a la máxima categoría tras empatar a cero goles con el Deportivo.
Es duro perder como se hizo ayer, pero ahora el grupo debe ser fuerte para levantarse. Esa virtud es la que marca a los grandes equipos. Luego, si no se puede conseguir el ascenso, nadie le echará en cara nada.
ELCHE 2:Caballero; Martí Crespí, Samuel, Tena, Ripa; Acciari, Usero (Generelo, m.46); Trejo (Saúl, m. 65), Wakaso, Juli (Perera, m. 67); y Molina. VILLARREAL B 3: Juan Carlos; Natxo Insa, Kiko, C. Tomás, Oriol; Jefferson Montero (Hernán Pérez, 85) , Matilla, Guillón, Cristobal (Flores, 78); Bordás (Joan Tomás, 70) y Marco Rubén.
Goles: 0-1 m. 6, Montero.0-2 M 45. Ripa p.p. 1-2 M.60 Molina. 2-2 M 77. Perera. 2-3 M 79. J. Montero. a Hernández Hernández (Canario). Ta T. amarillas: Matilla, Guillón, Montero, Wakaso, Generelo, Flor y Rubén.Tr T. rojas: Donat (13), Acciari (m.46) y P. Esteban (90).
