El Elche dejó ayer pasar una gran oportunidad para situarse a sólo un punto de las posiciones de ascenso. Los ilicitanos no pasaron del empate ante el Cádiz en un partido "loco" que tuvo de todo y que terminó con tablas en el marcador y tres futbolistas expulsados, dos por parte franjiverde (Samuel y Acciari) y uno por el lado gaditano (Enrique). Pero el resultado pudo ser todavía peor porque en el minuto 89 Arriaga se plantó sólo ante Caballero, pero el portero argentino volvió a demostrar que es el mejor guardameta de la categoría y realizó una gran parada evitando el desastre.

A los ilicitanos se le puso el encuentro de cara nada más empezar. A los siete minutos, Enrique pisó la espalda del Carleto y el árbitro le mostró una tarjeta roja tan justa como evitable. Pero a pesar de la ventaja numérica, el conjunto de Bordalás no supo leer el partido. Cuando tenía que haber tocado más el balón y desbordar por las bandas intentando los dos contra uno para romper la defensa del Cádiz, los jugadores franjiverde se empeñaron en lanzar, una y otra vez, balones al corazón del área donde el conjunto gaditano estaba bien parapetado. Durante los primeros 45 minutos el Elche apenas creó ocasiones claras y sólo un disparo flojo de Molina, cuando estaba demasiado escorado, puso en aprietos la meta visitante.

Decía Helenio Herrera que con diez se juega mejor que con once. Y curiosamente el conjunto ilicitano que había disfrutó de superioridad numérica durante toda la primera parte, cuando las fuerzas se igualaron al ver Samuel su segunda cartulina amarilla en el minuto 49, tan sólo un minuto después los franjiverde se adelantaron en el marcador con un gol de Molina.

Todos se las prometían felices y miraban el marcador electrónico donde se comprobaba que el Cartagena estaba perdiendo en Soria ante el Numancia y que el Hércules no había pasado del empate en Córdoba. Si el encuentro finalizaba con victoria, el Elche se situaba cuarto a tan sólo un punto del ascenso.

Pero el gozo cayó en un pozo. A raíz del gol franjiverde, el Cádiz estiró líneas y en el minuto 64, Diego Tristán recogió un balón dentro del área y dibujó una vaselina que cogió un trazado perfecto y se coló en la portería sin que Caballero pudiera hacer nada. El ex internacional demostró que el que tuvo retuvo.

Fue un jarro de agua fría que venía acompañado de la falta del delantero goleador, ya que con la ventaja en el marcador, Bordalás optó por sacar del campo a Molina para reforzar la defensa con Tena. El técnico franjiverde retrasó en un primer momento la posición de Acciari para ocupar el sitio del expulsado Samuel, pero con el 1-0 decidió reforzar la zaga con la mala fortuna de que cuando el Cádiz igualó el choque quedaban muchos minutos por delante y el máximo goleador del equipo no estaba en el campo.

El empate dejó tocado a los jugadores que durante unos minutos estuvieron groguis, lo que hacía presagiar lo peor. Pero rápidamente el equipo se recompuso. Santos comenzó a coger el protagonismo que no había tenido hasta entonces, Saúl, que había salido por Juli, trató de ponerle una marcha más al partido y parecía que el Elche estaba en condiciones de llevarse el partido. Se sucedieron varias ocasiones, pero el balón no encontró el destino deseado.

El Cádiz daba por bueno el empate y se encerró atrás esperando algún golpe de fortuna para ganar. Ambos equipos jugaban con diez hombres y cualquier cosa podía pasar después de un desarrollo de encuentro anormal. Los ilicitanos eran un querer y no poder y entre tanto, en el minuto 89, llegó la jugada de Arriaga. Cuando todo el estadio temía lo peor volvió a aparecer la figura de Caballero para evitar el desastre.

Pero un partido tan atípico no podía terminar sin algo más y en el tiempo de descuento Acciari veía su segunda tarjeta y era expulsado, terminando los franjiverde el encuentro con nueve.

ELCHE 1: Caballero; Ximo Navarro, Carleto, Martí Crespí, Samuel; Acciari, Wakaso; Juli (Saúl m. 52), Trejo (Perera, m. 85), Santos; y Molina (Tena, m. 56).

CÁDIZ 1: Casilla; Cristian, Silva, Fragoso, Cifuentes; Erice (Mansilla, m. 92), Ormazábal, Enrique, López Silva (Jaume Costa, m. 73); Ogbeche y Diego Tristán (Arriaga, m. 71).

GOLES: 1-0 m. 50, Molina. 1-1 m. 64, Diego Tristán.

ÁRBITRO: Amoedo Chas del colegio gallego. Expulsó con roja directa a Enrique (m. 7) y por doble amonestación a Samuel (m. 40 y 49) y a Acciari (m. 86 y 91). Mostró tarjetas amarillas a Wakaso (m. 22), Diego Tristán (m. 39), Cristian (m. 55) y Ormazábal (m. 69)

ESTADIO: Martínez Valero. 7.318 espectadores