Fin al concurso de Fundesem: el juzgado extingue la sociedad limitada que tenía la escuela de negocios

El proceso concursal en el que entró la escuela de negocios alicantina Fudesem llega a su fin. Después de que la fundación responsable del centro lograra salir de esta situación gracias al acuerdo firmado con la Universidad Europea de Valencia –que le ha permitido recuperar la actividad docente-, el juzgado acaba de dar por concluido también el concurso de Fundesem Business School SL, con la extinción de esta sociedad que se creó en 2020 con el objetivo de externalizar la gestión de las clases y que suspendió pagos al mismo tiempo que la anterior.

En concreto, fue en 2020 -un año después de que Cayetano Sánchez Butrón asumiera la presidencia de Fundesem-, cuando se puso en marcha esta SL como una forma de optimizar la gestión del centro y también con la intención de captar capital mediante la venta de una parte de su accionariado para hacer frente a la deuda que arrastraba la escuela desde hacía años. De esta forma, se creó una doble estructura: por un lado la fundación original, que mantuvo la mayoría de la propiedad, y, por otro, esta nueva compañía.

Sin embargo, las dificultades derivadas de la pandemia impidieron que el plan funcionara y, posteriormente, la amenaza del Ivace de reclamar la deuda por el alquiler de la sede que ocupa la escuela de negocios en la calle Deportistas Hermanos Torres de Alicante llevó a sus responsables a solicitar el concurso de acreedores para ambas organizaciones en julio de 2022.

Convenio

En el caso de la fundación, Fundesem logró cerrar un convenio con sus acreedores gracias al acuerdo alcanzado con la Universidad Europea de Valencia, que desembolsó 1,5 millones de euros a fondo perdido y se comprometió a abonar un canon anual de alrededor de 400.000 euros a cambio de poder utilizar las instalaciones de la escuela alicantina para impartir cuatro grados relacionados con el sector sociosanitario (enfermería, fisioterapia, odontología y psicología). Además, la Universidad Europea también entró en el patronato de la fundación y asumió la gestión de la escuela de negocios que, de hecho, ya ha empezado a impartir de nuevos sus programas para directivos y tiene previsto recuperar la docencia de máster a partir de septiembre.

Por el contrario, desde el principio se vio que la única salida para la SL era su liquidación, ya que carecía de viabilidad y su actividad, en cualquier caso, podía ser asumida directamente por la fundación, como finalmente ha ocurrido. Además, su único activo era, precisamente, la deuda que mantenía con ella la fundación.

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De esta forma, el convenio de acreedores firmado por Fundesem –que preveía una quita del 45% de la deuda y el pago del 55% restante casi de forma inmediata- permitió recuperar a la SL alrededor de 115.000 euros, con los que el administrador concursal ha podido hacer frente a cerca de la mitad de la deuda que tenía la sociedad. Una deuda que se correspondía principalmente con los salarios de los profesores y del personal de la escuela y, posteriormente, con el Fogasa, una vez que este organismo asumió los pagos, como ocurre en estos casos.

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Una vez concluidos estos pagos y ante la inexistencia de más activos con los que poder conseguir dinero para pagar las cantidades restantes, el juzgado de lo Mercantil número 1 de Alicante ha dictado el auto de conclusión del concurso y ha ordenado la extinción de esta sociedad, tal y como publicaba el BOE este mismo lunes.

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