Alicante se consolida como el motor del sector inmobiliario en la Comunidad Valenciana. La provincia acaparó el año pasado el 50,8% de las 79.190 trasacciones de viviendas que se formalizaron en la autonomía, de acuerdo con el informe que ha hecho público este jueves BBVA Research, aunque, eso sí, las ventas crecieron más porcentualmente en Valencia (21,2%) y Castellón (20%).

Desde que alcanzaron su mínimo, en el año 2011, el número viviendas vendidas en la Comunidad ya se ha incrementado en un 66,1%, un incremento algo menor de la media española (77,1%).

En cualquier caso, el informe destaca que este impulso de la demanda está comenzando a notarse en los precios del metro cuadrado. Si bien la región cerró el año con una disminución del 0,1% en el precio del metro cuadrado, ha arrancado el año creciendo un 1,6%, un dato empujado, sobre todo, por el ascenso de Alicante (1,9%).

Importante peso de la segunda vivienda

Los expertos de BBVA Research recuerdan que el mercado inmobiliario español encadena ya cuatro años consecutivos de crecimiento. Una tendencia al alza que se asienta sobre "la creación de empleo, los bajos tipos de interés, la confianza de los hogares, la escasa rentabilidad de activos alternativos, el buen tono de la demanda extranjera están detrás de estos datos".

Eso sí, la evolución es muy distinta según la autonomía de la que se trate. En el caso de la Comunidad Valenciana, el peso de la vivienda principal (49,3%) es menor que en la media española (69,4%). Un 33% de las viviendas están compradas por extranjeros, algo especialmente perceptible en Alicante, donde el porcentaje alcanza el 48,8%. El principal mercado es Reino Unido, cuyos residentes firman un 17% de las transacciones de personas de fuera del territorio español. Lo siguen Suecia (9,7%) y Bélgica (9,3%).

En Castellón, por su parte, destaca la compra de segunda vivienda por parte de españoles residentes en otras provincias, que suponen un 33,6% de la demanda. Madrid es el principal mercado de origen de los compradores de vivienda en la comunidad. En Alicante tiene un peso significativo los compradores de Murcia, mientras que en Valencia destacan los barceloneses y en Castellón los valencianos.

Los residentes en la Comunidad Valenciana que compran una segunda residencia lo hacen, en gran medida, en la propia región o comunidades adyacentes. El principal destino de los alicantinos es Murcia (26%) y Valencia (17,8%). Los castellonenses se decantan por Valencia (42,8%). Mientras, los valencianos adquieren una segunda residencia en Alicante (29,8%) o Castellón (24%).