Si hay un país donde la transformación digital y la apuesta por la innovación están cambiando la sociedad a marchas forzadas, sin duda es China. Óscar Esteban dedicó la segunda parte de su exposición a relatar cómo las nuevas generaciones del país asiático han abrazado la tecnología sin contemplaciones y de qué forma contribuye esta tecnología a cambiar, incluso, el modelo económico chino.

Y todo a través del teléfono móvil, un aparato que en 2006 sólo poseía en 1% de la población y que en la actualidad ya está en manos de la mitad de los chinos. De esta forma, el comercio electrónico ya mueve en el gigante asiático 752.000 millones frente a los 395.000 millones de Estados Unidos.

Esteban recalcó que China ha pasado de ser el país de las falsificaciones a ser el país al que copiar por su decidida apuesta por la innovación y puso el ejemplo del fabricante de móviles Huawei. Si en 2010 vendía 1,5 millones de teléfonos a un precio medio de entre 175 y 206 dólares, el pasado ejercicio ya vendió 150 millones de unidades y, lo que es más reseñable, con un precio de 577 a 821 dólares. Es decir, que no sólo aumenta sus ventas sino que consigue mayores ingresos por sus productos gracias a la innovación. Igualmente, el experto señaló que ha sido una firma china la que ha puesto en el mercado el primer chip de Inteligencia Artificial.

Otro de los aspectos a destacar es que, frente a la proliferación de aplicaciones que existen en otros países, en China es WeChat la aplicación desde la que se realizan casi todo: desde la consulta de las páginas web hasta el pago en comercios.