La siniestralidad laboral en la provincia volvió a crecer en el primer trimestre del año. Hasta marzo, se registraron 3.708 accidentes durante la jornada de trabajo, lo que representa un aumento del 4,9% en relación al mismo periodo del año anterior, según la comparativa de los últimos datos del Ministerio de Empleo y Seguridad Social. No obstante, a ese total hay que sumar los 567 denominados «in itinere» -los que sufren los empleados al ir o al volver al lugar de trabajo-, con lo que la cifra se eleva a 4.275, que significan un aumento del 5,3%.

Un incremento «significativo que vuelve a poner de manifiesto que las medidas para prevenir los accidentes laborales siguen siendo insuficientes», subrayaba Adolfo Durán, secretario de la Federación de Industria, Construcción y Agro de UGT en l'Alacantí y La Marina. El dirigente sindical, además, advertía de que, «en general, el repunte de la actividad económica, tras el largo periodo de crisis, no ha venido acompañado por el reforzamiento de las medidas de prevención de riesgos laborales».

Por otra parte, al igual que en el primer trimestre del pasado año, el sector que registró más número de accidentes de trabajo fue el industrial, con 654, seguido del comercio, con 637, y de la construcción, con 503. No obstante, es esta última actividad la que experimenta el mayor crecimiento, con un 16,1% más de accidentes que en los tres primeros meses de 2017, frente al aumento del 1,8% de la industria.

Otra actividad donde también se aprecia una destacada subida de la siniestralidad es la de la hostelería, ya que los 366 siniestros laborales producidos representan un 11,9% más que hace un año. Por su parte, los 356 que se cuantificaron en la actividad del transporte y el almacenamiento representan un crecimiento del 3,9%.

La inmensa mayoría de los accidentes laborales que se producen son de carácter leve. De hecho, de los 3.708 registrados durante la jornada de trabajo hasta marzo, 3.687 tuvieron esta calificación. Y, además, en este periodo, ha habido una significativa reducción de los de carácter grave y de los mortales. Sólo ha habido 19 trabajadores heridos de gravedad durante la jornada laboral, frente a los 28 del primer trimestre de 2017. Y el número de operarios fallecidos en un accidente laboral ha bajado de seis a dos en doce meses antes. Un descenso que los sindicatos valoran. «Es una buena noticia», destacan Durán y Javier Pérez, responsable de Salud Laboral en CC OO en l'Alacantí-La Marina. Así, los representantes sindicales confían en que se reduzcan estas cifras, «ya que al finalizar el pasado año fueron 25 los trabajadores fallecidos, lo que representa un número muy elevado de muertes en el ámbito laboral», advertía Pérez.

Piden más actividad inspectora

Pese al descenso de estas cifra, también admiten que los datos de un solo trimestre es un periodo corto de tiempo para que pueda indicar un cambio de tendencia, «hay que ver la evolución del año», coinciden UGT y CC OO. Ambos sindicatos, además, inciden en que con el repunte de la actividad económica, tras el periodo recesivo, «no ha habido una mayor actividad de la actividad inspectora. Hay que reforzar con más efectivos a la Inspección de Trabajo para hacer una mayor vigilancia del grado de cumplimiento por parte de las empresas de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales», añadían. La necesidad de implantar más medidas preventivas es una constante reivindicación de los sindicatos. Javier Pérez aseguraba que, en el caso de la construcción, «la mayor parte de los accidentes que se producen son los mismos que hace 30 o 40 años: las caídas de altura. Y hay sistemas para que el trabajador no sufra una caída de un andamio», añadía.

Por su parte, Adolfo Durán exigía que, en general, las empresas «deben dar mayor participación a los representantes de los trabajadores en la gestión de la prevención de riesgos laborales». Y también reclamaba que se aumente la formación a los trabajadores «para que puedan conocer mejor los riesgos y la medidas preventivas específicas de los puestos de trabajo».