El secretario de Estado de Asuntos Europeos, Jorge Toledo, no eludió ayer las preguntas de los asistentes al foro sobre el conflicto catalán. Así, cuestionado por el posible paralelismo entre el Brexit y el proceso independentista, Toledo negó cualquier similitud y recordó que la salida del Reino Unido de la UE se ha hecho siguiendo las normas establecidas para ello en los propios tratados de la unión, mientras que en Cataluña «se ha violado la Constitución Española, los tratados de la Unión Europea, el Estatut de Cataluña y hasta el reglamento del Parlament». «Es un contraste absoluto», añadió.

Poco después, ante la pregunta de otro de los asistentes, también reconocía que el conflicto catalán había sido «absolutamente decisivo» en el hecho de que Barcelona no resultara elegida como nueva sede de la Agencia Europea del Medicamento. «Cuando 2.700 empresas estaban huyendo de Cataluña, era difícil atraer a una de las agencias más importantes de la UE», apuntó. En cualquier caso, el diplomático se mostró convencido de que ni el Brexit ni Cataluña ponen peligro la continuidad de la UE, en este último caso, «porque Cataluña no va a independizarse de España». Eso sí, reconoció que, si todas las regiones con aspiración a tener su propio estado «siguieran este camino», la UE tendría «un panorama extraordinariamente complicado que, probablemente, llevaría a su destrucción», aunque cree que es una situación muy difícil de que se produzca.

El secretario de Estado también minimizó el impacto que puede tener la decisión de los tribunales alemanes de rechazar la extradición de Carles Puigdemont por el delito de rebelión y concederla únicamente por malversación de fondos. «Es una decisión sobre medidas cautelares en base a una euroorden, no se trata de una decisión sobre el fondo», señaló.

Gibraltar

Por otro lado, Toledo destacó el logro de haber conseguido que ningún acuerdo que se pacte entre la UE y el Reino Unido se aplique a Gibraltar sin el acuerdo expreso con España.