El Consejo de Ministros daba luz verde este viernes a un real decreto que permitirá a partir del año 2025 liquidar, sin limitaciones, las aportaciones realizadas durante al menos 10 años a los planes de pensiones, así como los rendimientos generados, y también ha revisado a la baja las comisiones máximas que los ahorradores pagan a las entidades gestoras.

Así, se podrá disponer de las aportaciones con una antigüedad de al menos diez años a partir del 1 de enero de 2025, es decir, las realizadas hasta 2015. Las realizadas a partir de 2016 deberán esperar hasta 2026 y así sucesivamente. Pero, ¿cómo se debe declarar a Hacienda el rescate de un plan de pensiones?

Como hasta ahora, el rescate de un plan de pensiones seguirá tributando como rendimiento del trabajo, con tipos en el IRPF entre el 19% y el 45%, según los tramos de renta. Esto quiere decir que si se rescata todo dfe golpe supondrá tener que pagar un contante bastante fuerte. Por ejemplo, si rescatamos 30.000 euros de un plan de pensiones y cobramos como media 2.000 euros al mes de pensión de jubilación, deberemos pagar en el impuesto de renta como si ese año hubiésemos ingresado 54.000 euros - 2.000 x 12 = 24.000 de salario como pensionista y los 30.000 del rescate del plan de pensiones-.

Así, el impuesto de renta es algo progresivo, lo que quiere decir que cuando uno rescata un plan de jubilación, éste entra dentro de este impuesto, por lo que los que ganan más pagarán un mayor porcentaje. Cuanto mayor sea el importe que recibamos, mayor será el porcentaje a pagar en impuestos.

Pagar menos impuestos

A la hora de rescatar un plan de pensiones, lo mejor es hacer un estudio pormenorizado de la situación económica de cada uno. No tener paciencia y dejarse llevar por las prisas para sacar ese dinero puede ser fatídico en el futuro.

Lo más recomendable sería pensar en el año que menos dinero vamos a ingresar por el trabajo para hacer este rescate. Por norma general, se cobra menos de pensión que de salario, por lo que un momento idóneo para hacer un rescate de un plan de pensiones sería el primer año de la jubilación.

Por otro lado, el impuesto, al ser progresivo, provoca que la idea más acertada sea la de sacar el dinero poco a poco. Se puede retirar una determinada cantidad cada año o establecer una renta mensual para tener todos los meses un complemento al importe de la jubilación.