Lejos de reducirse, por más viviendas de segunda mano que se venden en la provincia, la oferta de inmuebles disponibles no deja de aumentar. O, al menos, eso es lo que ha ocurrido durante los últimos tres años en Alicante, en los que el número de pisos y apartamentos en el mercado en la zona se ha disparado un 44,7% a pesar de que el volumen de ventas también ha crecido por encima del 40% durante el mismo periodo
En concreto, si en diciembre de 2014 se ofertaban 25.743 viviendas usadas en toda la provincia, al cierre del año pasado la cifra alcanzaba las 37.260, según los datos de Idealista. Un aparente contrasentido que, sin embargo, desde el citado portal consideran todo un síntoma del dinamismo del mercado inmobiliario alicantino y de la fuerza con la que se está recuperando el sector.
«El stock de viviendas en venta puede aumentar por dos motivos: bien porque no hay demanda y los pisos se acumulan; o bien porque la reactivación del mercado anima a los propietarios a sacarlos a la venta porque ven posibilidades de colocarlos. Está claro que en Alicante lo que está ocurriendo es lo segundo», apunta el portavoz del portal, Carlos Rueda, que recuerda que la provincia es una de las zonas donde más operaciones se cierran de todo el país, con una cifra que se aproxima ya a las 10.000 compraventas trimestrales.
Dicho de otra forma, que la recuperación está aflorando la oferta que permanecía retenida a la espera de mejores tiempos por parte de ciudadanos que no querían malvender los pisos que compraron como inversión durante el «boom», la herencia de la abuela o, «simplemente, que querían desprenderse de la casa pero no podían porque el precio que les ofrecían no cubría la hipoteca», apunta el experto.
El empuje de la costa
Como es lógico, son las zonas de costa donde más se está notando esta tendencia, ya que gran parte de los compradores que en estos momentos tienen capacidad para adquirir un inmueble son extranjeros o familias acomodadas que buscan una segunda residencia. Así, en Altea el stock de viviendas en venta ha aumentado hasta un 75,7% en estos tres años; en Benidorm, un 39,1%; en El Campello, un 36,2%; o en Xàbia, un 21,4%. Por encima de todos ellos, destaca la situación de la ciudad de Alicante, donde la oferta de pisos disponibles ha pasado de 7.870 a 10.884 en este periodo.
Este incremento del stock disponible también ha tenido otro efecto positivo -al menos, para los posibles compradores- y es que ha contribuido a mantener a raya los precios, a pesar del incremento de la demanda. Así, el año pasado el metro cuadrado apenas se encareció un 1,9% en la provincia, hasta situarse en los 1.208 euros de media. Nada que ver con el incremento del 7,1% que se registró en Madrid, donde la oferta está menguando. Para ser exactos, el volumen de viviendas disponibles para la compra en la capital del país ha disminuido nada menos que un 42,9% en los últimos tres años ya que allí la demanda se recuperó con mayor fuerza.
Bilbao, Girona, San Sebastión o Pamplona son otras de las ciudades donde la oferta se ha reducido, según los datos de Idealista.
De cara al presente ejercicio, las previsiones del portal es que el número de transacciones inmobiliarias en la provincia continúe al alza, a medida que se consolide la mejora de la economía, lo que favorecerá que la demanda interna regrese al mercado y se sume a los extranjeros y los compradores de segundas residencias.
