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La exportación más exótica

Alicante vende, además de a sus mercados tradicionales, a zonas tan lejanas o singulares como las Islas Feroe, Corea del Norte, Papúa Nueva Guinea o Ciudad del Vaticano.

La exportación más exótica antonio amorós

Islas Marianas del Norte, una operación comercial por valor de 300 euros. Una acción en el exterior -en el Pacífico, a más de 13.000 kilómetros de distancia de Alicante- que serviría a modo de ejemplo de los más de cuarenta pequeños destinos, lejanos y exóticos, a los que también se dirige la exportación provincial. Entre otros, la hermética Corea del Norte o las paradisíacas Islas Fiyi, en Oceanía, pasando por Ciudad del Vaticano, Australia o Groenlandia.

Al margen de los principales mercados, que aportan las grandes cifras, la facturación de los envíos a zonas más singulares es poco relevante, pero pone de relieve la dinamicidad de la economía alicantina. Hasta septiembre, el conjunto de las ventas totales de la provincia al exterior habían superado los 3.910 millones de euros, un 1,4% más que en el mismo periodo del pasado año.

Sin embargo, estas ventas mostrarían cómo la vocación exportadora de las empresas alicantinas no tiene límites, y más en plena era de la globalización. Especialistas en comercio exterior califican las cifras que arrojan estos destinos como «anecdóticas», ya que no tienen peso específico en el conjunto de la facturación internacional. En realidad, son destinos llamativos por las cuantías de las operaciones y la lejanía o diferenciación con respecto a los más tradicionales. Con la caribeña Isla de San Bartolomé este año se ha realizado desde Alicante un envío por un valor de 60 euros. Según las estadísticas de las Cámaras de Comercio de España -basadas en los datos de Aduanas- la operación se encuadraría dentro del capítulo de manufacturas de espartería o cestería. Este envío, al igual que otros de mínimo coste, es una acción comercial que se aleja de las grandes cifras de exportación.

Comercio online

Fuentes empresariales ligadas a la exportación las relacionan más con el nuevo mercado abierto por la globalización y la implantación de las nuevas tecnologías, que han impulsado la venta online y el desarrollo de las plataformas digitales por las que desde cualquier punto del mapa mundi un consumidor puede realizar una compra a una empresa situada a miles de kilómetros de distancia o a un portal de venta.

En este contexto, también podría enmarcarse otra operación de pequeño coste -300 euros- como la que se realizó con las Islas Marianas, situadas en el Pacífico Norte, territorio con estatus de Estado Libre Asociado de Estados Unidos, pero con antiguas vinculaciones con España. Fernando de Magallanes fue su descubridor en el siglo XVI y las llamó «islas de los ladrones». Un siglo después fue cuando adquirió su actual denominación en homenaje a Mariana de Austria, mujer de Felipe IV de España. A estas islas de origen volcánico, situadas en el denominado Cinturón de Fuego del Pacífico, se han enviado desde Alicante artículos encuadrados en el capítulo de exportación de prendas o complementos de vestir.

Al igual que en el global de la exportación provincial, el calzado es el que predomina en estas operaciones comerciales a los lugares más llamativos, ya sean las dirigidas a Albania (calzado, textiles y plásticos); Burundi (calzado); Bermudas (calzado); Islas Feroe (textil y calzado); Kirguistán (calzado, prendas de vestir y cuero); Polinesia francesa (calzado y plástico) o San Marino (juguetes, calzado, muebles y textil), entre otros.

Pero entre los muchos destinos que este año ha tenido en el exterior la industria zapatera provincial, también se encuentra Corea del Norte, uno de los países más cerrados del mundo -política y económicamente- y que está liderado por el singular militar Kim Jong-un. Allí se han enviado este ejercicio artículos encuadrados en el capítulo exportador del calzado. Operaciones que han representado un valor de 15.150 euros, según los mismos datos estadísticos.

Calzado,mármol, textil...

El sector zapatero es el líder del comercio internacional alicantino. Sus exportaciones superaron hasta septiembre la cifra de 939,6 millones de euros, que representan un 4,8% menos que en el mismo periodo del año anterior. Un descenso que, sin embargo, es muy inferior a la caída que había experimentado en 2016. Sus principales clientes en el mundo son los mercados de la Unión Europea, además de Estados Unidos o China. Pero también entre las operaciones que ha registrado este año se encuentra la realizada con Ciudad del Vaticano. Hasta este pequeño Estado -enclavado en la misma urbe de Roma, donde residen el Papa Francisco y la Curia Vaticana- se ha enviado calzado alicantino en varias operaciones que han sumado un montante de 6.790 euros.

Por su parte, el mármol, otra industria netamente exportadora, vendió al exterior hasta el pasado mes de septiembre por un valor superior a los 183 millones, entre manufacturas de piedra natural y bloques de mármol en bruto, según los últimos datos del Instituto de Comercio Exterior (ICEX) en Alicante. Aunque la crisis de importantes mercados como China o los países árabes han pasado factura en los últimos años a su internacionalización.

Además de los grandes clientes, entre los destinos más singulares de este sector se han encontrado este año Bangladesh; las Islas Fiyi,en Oceanía; Irán; Islas Caimán y San Martin (parte neerlandesa), en el Caribe; Santa Elena y dependencias, en el Atlántico, o Surinam, en América del Sur. De forma paralela, se venden productos cerámicos desde la provincia a las islas caribeñas de Aruba o Santa Lucía; a San Eustaquio, que forma parte del archipiélago de las islas de Barlovento, en las Antillas Menores, o a las Islas Caimán.

Las antípodas

Gran parte de los importes de los envíos a estas zonas menos conocidas y poco tradicionales son reducidos. No obstante, entre ellos sobresale Australia, situada en las antípodas, donde la provincia vendió hasta septiembre productos por valor de más de 22 millones, entre calzado, frutas, cerámica o muebles.

También se exportó a Cuba (7,6 millones por maquinaria, calzado o féculas) o a Groenlandia (21.490 euros, entre textil y calzado). La caribeña isla de Anguilla es otro receptor de productos alicantinos, sobre todo aluminio.

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