? El estudio de la Fundación BBVA y el Ivie también analiza los efectos de la crisis según el nivel de riqueza. Curiosamente, aunque los ingresos de las familias más desfavorecidas se redujeron más que las de aquellas que disfrutaban de una posición más desahogada -un 37,6% frente a un 11,6%-, fueron estas últimas las que más recortaron sus gastos y su consumo -un 17% frente al 7,6%-. ¿El motivo? Los hogares más modestos tenían menos de donde recortar, ya que la mayoría de sus gastos son de primera necesidad. El resultado fue que la mayoría de estos hogares tuvieron que tirar de sus ahorros para llegar a fin de mes. El informe también pone de manifiesto el aumento de la desigualdad a lo largo de los años de crisis.