El patronato de la Fundación CAM dio ayer luz verde al convenio que debe suscribir con el Ayuntamiento de Alcoy y con la Generalitat para reabrir el Centro de Arte de Alcoy (CADA) y que, además, éste se convierta en una subsede del Institut Valencià d'Art Modern (Ivam). Un proyecto que permitirá devolver al uso público un edificio que lleva cerrado varios años por las deficiencias de sus construcción.

Por otra parte, el patronato también decidió crear una comisión para decidir si, finalmente, recurrirá la sentencia de la Audiencia Nacional que condenó a cuatro exdirectivos de la desaparecida Caja Mediterráneo por su gestión al frente de la entidad pero que no prevé ninguna indemnización para la fundación. La heredera de la Obra Social también quiere recortar su partida de gastos jurídicos, una vez que el Supremo ha dictaminado que el Sabadell debe pagar por las cuotas.