El presidente de la Asociación Española de Banca, ha alertado este viernes de que el euro volverá a correr peligro cuando llegue la próxima crisis económica si no se completa el proceso de unión bancaria en el continente. Al respecto, Roldán recordó que lo que está en juego es "la competitividad de las empresas" ya que esta falta de unidad fue lo que provocó que durante la última recesión que las pymes españolas "tuvieran que pagar hasta siete puntos más que las alemanas" por sus créditos, "algo que no nos podemos permitir".

El presidente de la patronal bancaria se ha pronunciado en estos términos durante la conferencia que ha ofrecido con motivo de las XXXII Jornadas sobre economía española que organiza el Instituto de Economía Internacional de la Universidad de Alicante, que en esta edición se han centrado en analizar el proceso de construcción europea.

En este sentido, Roldán ha señalado que una de las principales fortalezas de la Unión Europea es que sabe reaccionar con contundencia cuando se produce una crisis, como ha ocurrido en esta ocasión, cuando puso en marcha el proceso de unión bancaria cuando el euro ya se encontraba "a medio metro del precipicio". Pero, al mismo tiempo, ha lamentado la falta de avances significativos una vez que se ha superado lo peor de la recesión, lo que puede provocar que la situación se repita.

El máximo dirigente de la AEB ha recordado que el origen del problema y lo que ocasionó que la crisis de deuda soberana de los países se contagiara al sistema financiero fue la estructura "altamente deficiente" con la que se puso en marcha la moneda única. Así, cuando se produjo la crisis "quedó claro que un euro de Malta no valía no lo mismo que un euro de España o que un euro depositado en un banco alemán", lo que se tradujo también en el citado sobreprecio de hasta siete puntos que tuvieron que pagar las pymes españolas por sus créditos, ante los mayores costes de los bancos nacionales para obtener recursos.

Por eso, ha urgido a finalizar el proceso de unión bancaria que, a su juicio, evitaría el euro sufriera de nuevo esta división. En este sentido, ha instado a reforzar la supervisión del BCE con un mayor volumen de regulación financiera común. Por ejemplo, ha señalado que sería positivo tener una marco común sobre las hipotecas, que suponen la mayor parte del balance de las entidades financieras.

Del mismo modo, consideró "más urgente que nunca" completar la unidad del mercado de capitales ante la inminencia del Brexit, que precisamente dejará fuera de la UE la principal plaza actual.

Por último, ha considerado clave lograr un Fondo de Garantía de Depósitos común "completamente mutualizado" para todas las entidades del continente, para evitar nuevas distorsiones. En este sentido, aunque ha lamentado la falta de avances en los últimos tiempos, también se ha mostrado esperanzado con el hecho de que se haya reactivado el eje franco-alemán en la UE, tras la victoria de Macron en el país vecino. "A todos nos va mejor cuando este eje funciona", ha asegurado el experto.