Los órganos de gobierno de la Confederación Empresarial Valenciana (CEV) acordaron ayer que el 16 de noviembre la entidad celebrará una asamblea general para aprobar las cuentas y los nuevos estatutos, que la convertirán en la sucesora de la extinta Cierval. La organización desveló ayer algunos detalles de su futura estructura. Así, el comité ejecutivo estará integrado por hasta 25 vocalías, de las cuales 13, es decir, la mayoría, se reservan a Alicante (8) y Castelló (5). A València le corresponderán las 12 restantes.
Serán representativas de los sectores y territorios y se distribuirán de la forma descrita «siempre que la composición de la junta directiva lo permita». Esta última verá incrementadas sus vocalías hasta un máximo de 100 y mantendrá la proporcionalidad de la representación territorial y sectorial de la base de la asamblea, según informó ayer la CEV en un comunicado.
Los mencionados vocales del comité ejecutivo deberán pertenecer a su respectivo Consejo Empresarial Provincial, una novedosa figura creada por la nueva CEV para sustituir a las antiguas patronales provinciales que integraban la Cierval. Esos consejos carecerán de estructura propia y su principal función será la de representar a la CEV en su respectivo ámbito territorial. Los presidentes de cada uno de esos órganos provinciales serán miembros del comité ejecutivo y de la junta directiva y ostentarán el rango de vicepresidentes de la CEV. Para su elección, se constituirán asambleas electorales provinciales de las que formarán parte los miembros de la CEV domiciliados en el territorio correspondiente, según la citada nota. Asimismo, las federaciones de la CEV de ámbito autonómico podrán formar parte de cuantas asambleas electorales provinciales correspondan a su ámbito. Cada consejo estará integrado por el presidente y los vocales de la junta de la CEV con domicilio en la provincia correspondiente. Los consejos podrán ser convocados por el presidente de la CEV o a solicitud del 20 % de sus vocales.
En este contexto, la organización aprobó ayer la incorporación de la Asociación Provincial de Promotores Inmobiliarios de València, de la Asociación Club de Empresas Responsables y Sostenibles de la Comunidad Valenciana y de la Federación Empresarial de Formación de la Comunidad Valenciana. Asimismo, dio su visto bueno a la entrada de las empresas Idai Nature, Insomnia Accelerator, Levante Wagen y Kirisama, así como de la Unión Profesional de València, que agrupa a 38 colegios profesionales de ámbito provincial y autonómico. Con estas entradas, la patronal CEV suma 180 asociaciones sectoriales y territoriales y 110 empresas directamente asociadas. Entre las asociaciones alicantinas integradas se encuentran la metalúrgica Fempa, la hotelera Hosbec, la del calzado Avecal y la empresarial de la Marina Alta Cedma.
Las diferencias con Coepa
La nueva patronal provincial alicantina Cepal (Consejo Empresarial de la Provincial de Alicante), creada recientemente por Coepa y Cepyme, pretende incorporarse a la estructura de la CEV. De hecho, la denominación de esta organización es muy similar a la figura de los Consejos Empresariales Provinciales que funcionarán en la entidad que preside Salvador Navarro.
No obstante, las diferencias que arrastran ambas organizaciones persisten. Mientras la CEV sustituye el papel que tenían las patronales provinciales en el antiguo modelo de Cierval por los Consejos y entiende estos órganos como dependientes de la matriz autonómica, Coepa y Cepyme sostienen que debería ser Cepal quien ostentase la representación de Alicante.
Por otra parte, al comite de la CEV de ayer asistieron como invitadas Sonja Dietz, presidenta del Cercle Empresarial de la Marina Alta (Cedma) y Marián Cano, mandataria de la asociación zapatera Avecal.
