El presidente de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), José María Marín Quemada, afirmó ayer que el organismo supervisor está analizando «con atención» el encarecimiento puntual que se produjo el pasado lunes en el mercado de ajuste del sistema eléctrico que, junto a condiciones climatológicas «adversas», produjo un incremento del precio de la electricidad «atípico» en esta época del año.

Así, Martín Quemada reconoció que parte de este encarecimiento se debe a la falta de agua en los embalses, poco frecuente en esta época del año, lo que obliga a dar cabida a otras fuentes de energía más caras para suplir esta producción, en especial, las centrales de ciclos combinados que funcionan con gas natural. De esta forma, el precio de la electricidad en una media de 61,7 euros por megavatio hora (MWh), la cifra más cara del año.

Sin embargo, a esta falta de agua se suma otro factor que desde Competencia están analizando «con atención», como es el encarecimiento en el mercado de ajuste de la reserva de «potencia a subir». «Se trata de llamar a la potencia en un instante determinado en el que falta. Normalmente siempre es alto, pero ayer durante dos horas se produjo un repunte que es lo que estamos mirando», explicó Quemada antes de unas jornadas.

A la espera de los resultados de la investigación, Facua-Consumidores en Acción y la Confederación de Consumidores y Usuarios (CECU) denunciaron ayer que el pico puntual registrado en el precio de la electricidad es fruto de «un modelo que fomenta la especulación» y reclamaron al Ministerio de Energía que «ponga los medios para modificarlo». Para estas organizaciones, el actual marco regulatorio «solo favorece a las empresas» y el mercado de ajustes es «la fórmula a la que se acogen las eléctricas para inflar el precio coyunturalmente».