La crisis del sector inmobiliario abocó al cierre de su actividad a muchos profesionales autónomos, un colectivo que durante la época del «boom» habían registrado un destacado incremento. De hecho, en los últimos nueve años, esta actividad ha perdido casi 22.000 autónomos en la Comunidad Valenciana, al pasar de registrar 60.569 activos en julio de 2008 a los 38.575 actuales, es decir un 36,3% menos, según el estudio de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA). Este descenso es superior a la media nacional, que se sitúa en el 31,9%.

Antes de que el sector del ladrillo acusara el ajuste, los autónomos de la construcción en España superaban la cifra de 543.800. Sin embargo, nueve años después, los trabajadores por cuenta propia que operan en esta actividad han bajado a los 370.452. Además, ATA considera que «hoy, difícilmente, se volverá la cifra de aquellos años en el sector (la fase de mayor expansión). El número se moverá entre los 300.000 y los 400.000; pero nunca aquel medio millón»,reitera el presidente de la asociación, Lorenzo Amor, quien, por otra parte, cree que «la pérdida de autónomos habría sido mayor, si no hubiera sido por el crecimiento de otros sectores». El hecho de que uno de cada tres trabajadores por cuenta propia del ladrillo no sigan hoy en activo es visto con «preocupación» por ATA.

No obstante, Lorenzo Amor también manifiesta que de los más de medio millón de autónomos ocupados en la construcción hace una década, «no todos realizaban un trabajo autónomo, sino que era una forma encubierta de trabajo asalariado. Por eso, con la crisis, el descenso fue mucho mayor».

Para el presidente de ATA, fue en los años de «crecimiento desproporcionado» de estos profesionales en un único sector «cuando se dio un incremento de los mal llamados falsos autónomos». Por otra parte, la asociación subraya la incidencia que la desaparición de autónomos en la actividad inmobiliaria ha tenido en la evolución del volumen total del colectivo. «En el peor momento de la crisis, en España se perdieron 400.000 trabajadores por cuenta propia», añade Amor. Y si durante la recesión han desaparecido 170.000 en la construcción, «queda patente que casi la mitad del total de autónomos desaparecidos eran del sector inmobiliario», explica el presidente de ATA. Por comunidades, pese a que en todas ha bajado el número de activos en este sector, Castilla-La Mancha lidera el ranking, con un descenso del 40,7% desde 2008. Por detrás, las caídas más acusadas se han registrado en Aragón (-40,6%), Murcia (-39,9%), La Rioja (-37,5%) y la Comunidad Valenciana (-36,6%).