Los sindicatos acogieron ayer con una enorme alegría la decisión del Supremo que, a su juicio, tumba uno de los apartados «más injustos y dañinos» de la última reforma laboral. «La limitación de la ultraactividad de los convenios había desequilibrado la balanza a favor del empresario, que sólo tenía que esperar a que el convenio caducara», señaló ayer la secretaria general de CC OO en l'Alacantí, Consuelo Navarro, que recordó ejemplos como el de la concesionaria de la recogida de basuras de Alicante, que amenazó con aplicar el Estatuto de los Trabajadores. «Es una victoria muy importante. Va a quitar presión a los negociadores, que habían visto muy mermada su capacidad de maniobra», apuntaba la responsable de Empleo de UGT, Yaissel Sánchez. d.n.