Los autónomos que alcancen la edad de jubilación podrán cobrar el 100% de la pensión y continuar trabajando, según una enmienda que han pactado el PP, Ciudadanos, PDeCAT y el PNV para que sea incluida en la nueva ley que reformará distintos aspectos del régimen especial de los también llamados trabajadores por cuenta propia. En principio, el requisito principal para que el autónomo pueda compatibilizar el trabajo y el cobro pleno de la pensión es que tenga al menos un asalariado en plantilla.

En la actualidad, es posible trabajar después de la edad de jubilación y a la vez que se percibe la pensión, pero ésta última se reduce al 50%, independientemente de la jornada que se trabaje y de la actividad que se realice. Esta modalidad, en vigor desde una reforma de 2013, se denomina "jubilación activa" y ya es utilizada principalmente por los autónomos.

La información que ha trascendido sobre esta novedad de la llamada Ley de Reformas Urgentes del Trabajo Autónomo no precisa si quien se acoja ella estará obligado a cotizar a la Seguridad Social. En la fórmula de la "jubilación activa" se cotiza únicamente por incapacidad temporal y contigencias profesionales, más una "cotización especial de solidaridad", equivalente el 8% y que no computa para las prestaciones.

El acuerdo entre el PP, Ciudadanos y las derechas nacionalistas llegá meses después de que la ministra de Empleo, Fátima Báñez, lanzara una propuesta general para que sea compatible el cobro del 100% de la pensión y continuar trabajando, tanto para asalariados como para autónomos. Esa idea se incorporará a los debates de la Comisión del Pacto de Toledo sobre reformas futuras para preservar la sostenibilidad financiera de las pensiones.

En apariencia, compatibilizar el trabajo y el cobro completo de la pensión no supone un ahorro para el sistema salvo que se establezca el pago de una cotización. No obstante, la propuesta sí podría hacer que aflorasen situaciones ahora fraudulentas: las de aquellos autónomos que en ciertas actividades (la hostelería, por ejemplo) continúan de manera irregular trabajando en el negocio aunque alcanzaron la edad de jubilación y perciben el 100% de la pensión.

La ley que tramita el Congreso también incrementa la protección social de los autónomos, especialmente en el caso de las mujeres y en circunstancias como la baja por maternidad. Asimismo, se incluye la ampliación de seis a doce meses de la tarifa reducida de 50 euros en la cotización a la Seguridad Social para los nuevos emprendedores. Se establece asimismo que los autónomos podrán deducir de sus declaraciones tributarias hasta doce euros diarios de gastos de manutención cuando se vean obligados a comer fuera de casa por motivos de trabajo. Aquellos que trabajen en sus domicilios también podrán deducir el 20% de los gastos de agua, luz, electricidad y teléfono de la casa.