El ciberataque global que se desencadenó el viernes ha dejado hasta ahora más de 200.000 afectados en al menos 150 países y sus daños se pueden continuar extendiendo hoy lunes, cuando empresas y organismos retomen su actividad, alertó ayer la policía de la Unión Europea, Europol.

Expertos en seguridad informática advirtieron además de que nuevas versiones del virus informático que ha bloqueado decenas de miles de ordenadores con el objetivo de obtener un rescate económico pueden comenzar a propagarse en los próximos días.

Europol cree que el ciberataque, de una escala que las fuerzas de seguridad europeas no habían visto hasta ahora, es obra de criminales, no de terroristas, y recomendó actualizar los sistemas informáticos para evitar ser víctima de nuevas infecciones.

El software malicioso, que exige un pago en la moneda digital Bitcoin para recuperar el acceso a los ordenadores, golpeó a centros de salud en el Reino Unido, grandes empresas en Francia y España, la red ferroviaria en Alemania, organismos públicos en Rusia y universidades en China, entre otros. El director de la policía comunitaria, Rob Wainwright, advirtió de que el sector sanitario, que trabaja con información sensible de los pacientes, es especialmente vulnerable a ataques de este tipo, aunque recalcó que todas las empresas e instituciones corren riesgos si no toman medidas de protección.

«Todos los sectores son vulnerables y deben tomarse absolutamente en serio la necesidad de funcionar con sistemas actualizados e instalar todos los parches disponibles», dijo en una entrevista con el canal «ITV» británico.

El responsable de Europol puso como ejemplo a la banca europea, que en su opinión ha sabido levantar ciberdefensas adecuadas para hacer frente a ataques informáticos debido a que son el «objetivo número uno» del cibercrimen.

Un experto informático del Reino Unido de 22 años, que no reveló su identidad, fue identificado por los medios como uno de los responsables de que el ciberataque del viernes quedara inhibido varias horas después de comenzar a causar estragos. Este joven aseguró a la cadena BBC que nuevas versiones del «malware» cuya propagación él ayudó a desactivar comenzarán difundirse de forma inminente, «con bastante probabilidad el lunes».

«La primera versión de 'WannaCrypt' (el virus responsable del ciberataque) se pudo detener, pero la versión 2.0 probablemente corregirá ese fallo», afirmó en Twitter el experto, conocido como «MalwareTech».

Renault para hoy su producción

Las cadenas de montaje de coches de la planta que el grupo automovilístico Renault tiene en la ciudad de Douai (norte de Francia), cerca de la frontera belga, no están en funcionamiento hoy, debido a los ciberataques que sufrió el grupo. La dirección envió mensajes a sus empleados para comunicarles que la producción de coches estará suspendida esta jornada y que la actividad se reanudará en el turno de noche, en concreto en el taller que realiza piezas para otras factorías de la compañía, indicó el periódico «La Voix du Nord» en su web. La empresa explicó que tomó «esa decisión para permitir a los equipos informáticos continuar su trabajo para asegurar la producción».

El secretario del sindicato Fuerza Obrera (FO) Frédéric Gallet, puntualizó que sí que trabajará el servicio de aprovisionamiento de piezas, igual que los obreros que se encargan de montar las puertas de los vehículos, en este último caso para recuperar el retraso por un incendio en las instalaciones de un proveedor en la República Checa. Cerca de 3.000 asalariados de la factoría de Douai, donde se ensambla en particular el modelo Scénic, se verán afectados por esta medida.