Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El mundo cooperativo se diversifica

Las tecnologías, el comercio online, la cultura, el deporte o la ecología desembarcan en los negocios del trabajo asociado en la provincia

El mundo cooperativo se diversifica

Negocios de desarrollo de apps, de diseño de webs, de comercio online, de proyectos culturales y deportivos o de productos ecológicos han comenzado a incorporarse al mundo de las cooperativas de trabajo, diversificando su tejido empresarial. Aunque el sector servicios aún sigue representando el 41% del total de estos negocios cooperativos en la Comunidad, en el último año los que se crearon relacionados con las nuevas tecnologías nuevas tecnologíaso la cultura han crecido un 10%. Aumento que en la provincia se situaría en torno al 2%, según fuentes de la Federación Valenciana de Empresas Cooperativas de Trabajo Asociado (Fevecta).

La entrada de emprendedores de una edad media entre los 25 y 45 años, que suponen el 70% de los que se acercan a consultar a esta entidad, y el hecho de que el 58% tengan estudios superiores, frente al 9,5% de los que cuentan con formación básica, son factores que han determinado la ampliación del abanico sectorial en el mundo cooperativo. No obstante, la industria aún tiene un peso del 18% entre los negocios, la construcción, un 15% y las actividades comerciales, un 13. Los transportes suponen el 7%, mientras la educación y la agricultura, el 4% y 3%, respectivamente.

Además de la diversificación, el cooperativismo está encontrando eco entre los emprendedores, entre otras razones, porque la inversión inicial es menor que en otras fórmulas de apertura de negocios (el capital mínimo previsto es de 3.000 euros), así como por las ayudas que se pueden recibir, la posibilidad de contar con asociados, además de los socios-trabajadores, y tener un tratamiento fiscal específico. También se valora la posibilidad de elegir si los socios operan como asimilados a trabajadores por cuenta ajena (Seguridad Social) o como autónomos. Pero, igualmente resulta «muy interesante» para muchos emprendedores el carácter «democrático que en sí supone crear una cooperativa, ya que cada socio es un voto. Y aunque puedan entrar inversores, ellos no pueden tener el control», subrayaba Ferran Parada, de Vegadénia, creada el pasado año y dedicada a la producción de patés y mermeladas artesanales. Esta es una de las 45 cooperativas que en 2016 se crearon en Alicante. Entre otras, también lo hicieron Tennis-Project, dedicada a gestionar las carreras deportivas de jóvenes promesas del deporte de la raqueta, o Rowcoop.v. (Nueva vibra), que vende online productos de electrónica.

Generaciones jóvenes

La provincia cerró el pasado año con 582 cooperativas de trabajo y con 6.243 socios y trabajadores, según datos de Fevecta. Durante los años de la crisis, muchos eran los que optaban por esta vía tras quedarse en paro. Y aunque persiste esta tendencia, también hay profesionales o jóvenes «que se deciden por la cooperativa como fórmula de autoempleo», según indicaba Jesús Esteve, responsable de Fevecta en la provincia, quien incidía en que «cada vez se incorpora al mundo cooperativo gente más joven y cualificada. El pasado año continuó la tendencia de emprendedores que apuestan por sectores emergentes y aportan diferenciación o innovación. Además del de las tecnologías, también los nuevos negocios están vinculados a la alimentación, la ecología y el medioambiente. E, igualmente, se han creado cooperativas de vino o de temas industriales», añadía.

Tras más de una década como profesionales: jugador, entrenador y gestor, los tres socios de Tennis-Project, de entre 35 y 40 años, decidieron el pasado año crear una cooperativa de trabajo. Gestionan la carrera deportiva de jovenes tenistas con potencial. En estos momentos entrenan y llevan a dos jóvenes de Alicante (Irene Garcerán y Tea Pavlicic) y una de La Vilajoiosa (Lucía Cortez), además tienen colaboraciones con deportistas asturianos, según indicaba Antonio Segura, uno de los socios. Su diferenciación en el mercado es que se encargan de buscar «la financiación para que las jóvenes promesas puedan dar el salto a la élite, planificar la trayectoria y hacerla compatible con su dedicación. Y también gestionar el patrimonio de cara al final de su carrera -que suele ser corta- para que tengan recursos, además de que puedan seguir vinculados al deporte», explicaba Segura, agente deportivo y asesor jurídico dentro del equipo cooperativo, que tiene su sede en el Club de Campo, en Alicante. Los otros dos socios entrenan, fundamentalmente. Segura incidía en que la búsqueda de financiación es una tarea ardua. «Hay pocos patrocinadores». No obstante, cuentan con colaboradores, cuyas aportaciones ayudan a cubrir gastos de desplazamiento a torneos de los chicos, entre otros. Igualmente, se combinan fórmulas de márketing deportivo.

Patés y mermeladas

Vegadénia comenzó en esta población de la Marina Alta, donde tiene el domicilio social, aunque el obrador de patés y mermeladas artesanas está en Sedaví (Valencia). En esta zona es «donde hay más oferta de proveedores de producto con sello ecológico, por lo que nos acercamos allí, dado que la empresa se encuentra en pleno periodo de transformación para obtener el certificado ecológico, esperamos tenerlo en dos meses», explicaba Ferran Parada, uno de los tres socios-trabajadores. En estos momentos, la cooperativa -que también cuenta con un asociado de Alicante, «que ha sido clave en el impulso del negocio»- produce unas 3.000 unidades mensuales de patés vegetales o mermeladas. Venden en herbolarios o mercados de referencia como la Fira de Tots Sants. Y además de «la calidad, lo que nos diferencia es que las composiciones no llevan espesantes ni aditivos ni colorantes. Concentramos los sabores y aromas a base de asar y reducir de forma natural para que tenga esa intensidad», añade Ferran. Curiosamente, Vegadénia ha reunido a profesionales que han profundizado sobre la producción ecológica, pero que provienen del mundo de la ingeniería industrial, uno de ellos está especializado en diseño gráfico, y otra socia ha sido gobernanta de un hotel de cuatro estrellas. Ahora están inmersos en un curso de Fevecta para abrirse al comercio online.

Electrónica amigable con el medio

Del e-commerce, quien ya sabe es, Nueva Vibra (Rowcoop.v), creada el pasado año por tres socios, de entre 30 y 50 años, que comercializan productos de electrónica, desde altavoces a auriculares bluetooth o relojes cardio. «Son productos con diseño innovador (gadget) y amigables con el medio ambiente. Nuestra marca bandera es un referente en EE UU como House of Marley», indicaba Ricardo Sansone, uno de los socios.

La sede está radicada en Mercalicante y su principal mercado de ventas es Alemania. Son un ingeniero civil, un geofísico y un administrativo de ADE, con trayectoria como trabajadores por cuenta ajena, pero que el pasado año decidieron iniciarse por su cuenta.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats