? La crisis económica ha convertido a las entidades financieras en los mayores terratenientes del país. Según el informe de Tinsa, aproximadamente un 33% de todo el suelo finalista disponible en estos momentos -aquel que ya está urbanizado- está en manos de la banca. A ello hay que sumar que otro 23,8% es propiedad de la Sareb, la sociedad que el Gobierno creó para absorber los activos tóxicos de las entidades nacionalizadas. Por el contrario, los promotores tradicionales ya sólo poseen el 23% del suelo urbanizado del país, mientras que otro 11,4% está en manos de particulares para autopromoción y un 2,2% pertenece a cooperativas. Por su parte, las administraciones públicas son titulares de otro 1,6%.