La Federación Alicantina del Comercio (Facpyme) y la Asociación Empresarial de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (Estic) no están dispuestos a seguir formando parte de Cepyme si Cristóbal Navarro sigue al frente de la misma. Ambas organizaciones consideran que el «excesivo personalismo» con que el también asesor fiscal ha manejado la patronal le ha hecho perder buena parte de su representatividad y aseguran, además, que no sienten defendidos los intereses de su sector. Por eso, tanto una como otra optaron por solicitar la baja y marcharse antes de participar en la asamblea electoral en la que ayer Navarro fue reelegido por aclamación, al no haberse presentado ninguna candidatura alternativa.

De esta forma, tras años de protagonizar duros enfrentamientos con los máximos dirigentes de Coepa, Cristóbal Navarro debe afrontar ahora a los problemas de su propia organización, para la que estas bajas suponen un duro varapalo. No en vano, hay que recordar que los máximos responsables de Estic, Joaquín Garrido, y de Facpyme, Antonio Sáez, ocupaban hasta ahora, respectivamente, las vicepresidencias primera y segunda de Cepyme y que la última de ellas era la organización que más empresas aportaba a la confederación, con casi 10.000 comercios asociados, por lo que la pérdida de peso a partir de ahora es más que evidente.

«Sencillamente, ya no estábamos de acuerdo con el proyecto. No sentíamos que se defendieran los intereses del sector y tampoco nos gustaba la forma presidencialista que tiene Cristóbal (Navarro) de hacer las cosas», explicó ayer a este diario Antonio Sáez. Aunque las relaciones entre Navarro y los responsables de Facpyme nunca fueron excesivamente fluidas, los problemas se agudizaron el pasado invierno, cuando el presidente de Cepyme salió públicamente a defender la libertad de horarios, lo que enojó a los comerciantes. Entonces se logró reconducir la situación pero ya nada volvió a ser lo mismo.

En un principio, la intención del presidente de Facpyme era simplemente apartarse de la junta directiva sin abandonar la confederación, pero la forma en que se organizó el proceso electoral -con apenas cinco días para presentar candidaturas- y las pegas de Cristóbal Navarro para facilitar determinada documentación, según explicó el comerciante, llevaron a la directiva de esta organización a decidirse por pedir la baja «y seguir nuestro propio camino».Más de 20 bajas en cuatro años

En similares términos, el presidente de Estic, Joaquín Garrido, también justificó su marcha por el «excesivo personalismo» de Cristóbal Navarro, que «ha transformado Cepyme en un proyecto personal, sin apenas representatividad». Así, aseguró que durante su mandato «se han dado de baja más de 20 asociaciones» por lo que considera «imposible» que alguien con estas características «pueda liderar la organización que la provincia necesita para reivindicar su sitio ante Valencia y ante Madrid». Garrido también recordó que el propio Navarro había anunciado que se marcharía al finalizar el mandato y consideró «un error» que haya decidido continuar. En cualquier caso, dejó claro que no busca «ningún enfrentamiento, por lo que hemos intentado irnos sin hacer ruido». De hecho, aunque la petición de baja se cursó la semana pasada, no fue hasta ayer cuando el asunto trascendió al ver que no formaba parte de la candidatura a la junta directiva.

Por su parte, Cristóbal Navarro declinó ayer valorar la baja de estas organizaciones -lo que deja a Fempa como la asociación con mayor peso dentro de Cepyme- y se limitó a reconocer «discrepancias» con las mismas. Eso sí, en su discurso ante el pleno sí aludió a la necesidad de Cepyme de «crecer en tamaño, en representatividad y en capacidad de influir sobre los que nos administran», por lo que abogó por captar nuevas asociaciones que quieren integrarse en la patronal. Entre los objetivos para su nuevo mandato también apuntó un aumento de la presión para lograr leyes más duras contra la morosidad de las grandes empresas con sus proveedores -prohibiendo que las incumplidoras puedan contratar con la Administración- y también contra las que usan paraísos fiscales. Igualmente, reclamó ayuda para que la digitalización alcance a las pymes, mayor flexibilidad laboral y menos impuestos. Junto a Navarro, el nuevo vicepresidente primero de Cepyme será Guillermo Moreno, de Fempa, mientras que el vicepresidente segundo, será José Rizo, de Aesec.