El «family office» de la familia alicantina Alcaraz, que encabezan los fundadores de Goldcar, Juan y Pedro Alcaraz, ha conseguido hacerse con uno de los inmuebles más codiciados de Madrid, el que ocupa el número 23 de la calle Velázquez, esquina con Jorge Juan, en pleno barrio de Salamanca, según informó ayer la consultora inmobiliaria Aguirre Newman, responsable de la operación. Se trata de la antigua oficina central que Caja España tenía en la capital y que quedó en desuso tras la fusión de esta entidad con Caja Duero para formar Banco CEISS, posteriormente adquirido por Unicaja.

El inmueble cuenta con 2.548 metros cuadrados sobre rasante, 450 metros de semisótano de uso comercial y aparcamiento interior. Sin embargo, la intención de la sociedad de la familia Alcaraz es demoler su interior por completo -sólo se respetará la fachada, que tiene valor arquitectónico- para transformarlo en un residencial de lujo para el que, a buen seguro, no faltarán compradores ante el dinamismo que muestra este segmento inmobiliario en la capital española. Así, en las últimas operaciones cerradas en la zona se han llegado a pagar hasta 14.000 euros por metro cuadrado en promociones similares. No hay que olvidar que se trata de una de las zonas más cotizadas de Madrid, un barrio de clase muy alta, muy cerca del Parque del Retiro y de la milla de oro madrileña que constituye la calle Serrano.

Un año y medio en el mercado

Un año y medio en el mercadoBanco CEISS decidió desprenderse del edificio hace ya más de un año y medio, cuando decidió sacarlo a la venta por unos 18 millones de euros. Aguirre Newman se encargó entonces de distribuir el portfolio entre los principales «family office» nacionales e internacionales para sondear el apetito inversor por el inmueble. Sin embargo, según se ha publicado en diversos medios, las numerosas ofertas que se empezaron a recibir hicieron ver a los gestores de la entidad la posibilidad de conseguir un precio notablemente mayor si se esperaba algo más. De ahí, el tiempo transcurrido hasta que finalmente se ha cerrado la operación, cuyo precio final no ha trascendido.

Juan y Pedro Alcaraz son los fundadores de la empresa de coches de alquiler Goldcar, de la que también eran los únicos propietarios hasta que decidieron vender una participación del 80% al fondo de inversión de Investindustrial, que pagó unos 300 millones de euros por ella.

El segmento residencial de lujo madrileño ha atraído a numerosos inversores de todo el mundo en los últimos años, como muestra la compra del edificio España por parte del grupo chino Wanda. En este caso, sin embargo, la imposibilidad de demoler el interior provocó la retirada de la multinacional y la venta del inmueble al murciano Trinitario Casanova.