Hoy son cuatro las generaciones que han visto fabricar barcos Astondoa. A lo largo de todos estos años Astilleros Astondoa han apostado en gran medida por la tecnología, siendo el diseño y la innovación parte fundamental de su ADN, con el que ya llevan 100 años fabricando barcos. Y es lo que le ha hecho ser finalistas en los Premios In4Bankia en la categoría de Mejor Trayectoria Empresarial.

La filosofía que ha llevado a esta empresa a su primer centenario es que se aseguran de que todo responda a los más altos estándares de calidad, por lo que desarrollan todos los procesos en su propio astillero. Desde la carpintería, mecánica, poliéster hasta la confección de las tapicerías todo el proceso se realiza en sus propias instalaciones por su personal.

Pasión y compromiso

Construir un barco Astondoa requiere pasión y compromiso. Cada embarcación se diseña 100% al gusto y necesidades del cliente. Cada barco es único, hecho al detalle y a medida, Porque al igual que no hay dos personas iguales, no hay dos Astondoas iguales.

En Santa Pola, a tan solo 10 minutos del aeropuerto internacional de Alicante, los astilleros cuentan con una superficie de más de 30.000 m2 y unas instalaciones dedicadas íntegramente a la construcción de yates de hasta 122 pies. Todo el proceso de producción se realiza única y exclusivamente dentro del astillero atendiendo siempre a las necesidades de cada armador.

Los prototipos de cada embarcación se realizan con la última tecnología CAD-CAM. Mediante una máquina de fresado de 5 ejes, la mas grande de España destinada a la realización de barcos, se realizan modelos de tamaño 1:1 diseñados al milímetro. Posteriormente, a través de procesos creados en el astillero, estos modelos se convierten en moldes para la construcción de las embarcaciones.

Astondoa cuenta con naves dedicadas en exclusiva a la realización del poliéster, donde se fabrican todas las piezas del barco por separado utilizando las últimas técnicas. Cuentan con el área de carpintería y el área de mecánica.

Cada embarcación Astondoa pasa por las manos de más de 150 personas expertas, que se esmeran y ponen todo su cariño y conocimiento en cada pieza, convirtiendo cada barco, en una joya única.

Su ambición no es fabricar miles de barcos, ese es un propósito ya superado. La satisfacción al 100% de pocos pero muy exigentes clientes hace que su trabajo cobre sentido.