El plan de viabilidad de Coepa contempla tres soluciones distintas, según el carácter de la deuda, que en su conjunto asciende a 4,2 millones. Para los acreedores ordinarios, a los que se debe 769.000 euros, se plantea un convenio con una quita del 95% y el pago del resto tras seis meses de espera. Aquí es donde se incluye la deuda de Cierval, cuyo voto es decisivo para la aprobación del convenio. Para la hipoteca del centro de oficios que se debe al Instituto Valenciano de Finanzas -3,2 millones- se plantea la «realización» del activo. Es decir, la venta del edificio para saldar la deuda. Si no hay comprador el IVF podrá ejecutar el préstamo y la cantidad que quede pendiente tendrá que acogerse a la quita. Por último, para la deuda con los trabajadores y el Fogasa -alrededor de un millón- se plantea un plan de pago a ocho años. Si se aprueba el convenio, la principal amenaza a la continuidad de Coepa sería la denuncia penal que ha presentado el Servef por un supuesto fraude en subvenciones. d. n.