Aludium, la fábrica de aluminio de Alicante, cerrará este ejercicio con una producción cercana a las 69.000 toneladas, lo que supondrá un incremento de alrededor de un 15% sobre las cifras del año anterior, cuando ya consiguió incrementar su actividad otro 5%. Así lo ha asegurado el presidente y director de operaciones de la compañía, Manuel Ruano, durante el simulacro de incendio que ha realizado la firma en sus instalaciones de Agua Amarga con motivo de la "Semana de la Seguridad", una iniciativa que ha puesto en marcha la empresa a raíz del accidente que el año pasado le costó la vida a una de sus trabajadoras, la delegada de CC OO María del Carmen Martínez, por la que se ha guardado un minuto de silencio.

El acto, que también ha contado con la presencia del alcalde, Gabriel Echávarri, y de la directora general de Trabajo y Bienestar Laboral, Cristina Moreno, también ha servido para inaugurar el nuevo horno de recocido de la fábrica, que permitirá incrementar su capacidad actual de procesado de aluminio en otras 5.500 toneladas.

En este sentido, Ruano ha recordado que más del 80% de la producción de la factoría se destina a la exportación, con Alemania y el resto de países europeos como principal destino, aunque también vende en Oriente Medio, Asia, Chile o Canadá.

Así, la antigua fábrica de Alcoa, que desde hace un par de años es propiedad del fondo norteamericano Atlas Holdings, ya es el primer productor de aluminio para el sector de la construcción -donde se usa para el revestiminto de fachadas, por ejemplo, en aeropuertos-; el segundo en suministro para la fabricación de tapones para botellas; y el primero para los envases del sector de la cosmética.

Latas de conserva

Además, Ruano ha anunciado que la próxima semana enviarán la primera remesa de aluminio para la producción de latas de conserva, un nuevo mercado en el que quiere introducirse y en el que hasta ahora no tenía presencia.

Todo esto ha permitido incrementar en unas 50 personas la plantilla de la factoría -incluidas contrataciones temporales- lo que contrasta con los continuos ERE que encadenó entre el año 2009 y 2014.

Apagar el fuego en ocho minutos

Por otra parte, las instalaciones de Aludium han acogido hoy un simulacro de incendio para poner a prueba sus sistemas de seguridad y la efectividad del dispositivo que ha diseñado la empresa para combatir el fuego. Y es que, a pesar de que la mayor catástrofe que ha sufrido la factoría fueron las inundaciones de principios de los años ochenta, el mayor riesgo de esta industria son los incencios ya que en todo el laminado -el proceso que se aplica para reducir el grosor del aluminio desde los ocho milímetros con los que llega hasta los 0,2 con los que sale para distintos usos- el lubricante que se utiliza es queroseno y, por tanto, altamente inflamable.

Por este motivo, dentro de la plantilla se ha constituido una brigada de emergencia de la que forman parte hasta 67 trabajadores y que son los responsables de controlar el fuego y evitar su propagación hasta que lleguen los servicios de emergencia oficiales. En el simulacro los bomberos han tardado unos ocho minutos en llegar, lo que se encontraría dentro del margen de diez minutos que pueden resistir los trabajadores de Aludium con sus propios medios.