Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Éstos son los productos que le ofrecerán en la sucursal

Ante el declive de los depósitos a plazo, los bancos tratan de potenciar otros productos que ofrezcan más rentabilidad al cliente y que, de paso, les permitan cobrar más comisiones. Éstos son los que están en auge en estos momentos.

Fondos garantizados de rentabilidad variable.

Por lo general, el interés a abonar va ligado a la evolución que tengan una serie de valores de referencia, normalmente dos o tres acciones de compañías punteras. Si estas acciones suben a lo largo del periodo que se haya determinado, se pagará el máximo previsto, que en la actualidad suele ser entre un 1% y un 1,5%. En caso contrario, se pagará el mínimo, que en muchas ocasiones son unas décimas o, incluso, el 0%. El banco garantiza la devolución del 100% del capital invertido pero sólo al vencimiento del fondo. Si se quiere recuperar antes, el cliente deberá venderlo al precio que cotice en esos momentos en el mercado de valores. No está cubierto por el Fondo de Garantía de Depósitos.

Seguros de ahorro.

Los realizan las aseguradoras aunque también se comercializan en los bancos y suelen disfrazarse como planes de ahorro en los que se va metiendo dinero poco a poco. En el fondo no son más que un seguro de vida que se cobra a determinado plazo, según explican desde iAhorro.com. Su mayor problema es que suelen ser totalmente ilíquidos hasta su vencimiento, por lo que hay que tener la certeza de que no se necesitará el dinero. Ofrecen sobre un 1% anual en la actualidad.

Planes ahorro 5.

Los impulsó el Gobierno para favorecer el ahorro a largo plazo ante las reticencias de muchos ciudadanos a contratar planes de pensiones. Hay dos modalidades, los que se articulan a través de cuentas corrientes (CIALP) y los que lo hacen mediante seguros de ahorro (SIALP). Esta segunda modalidad tiene la ventaja de que el inversor puede mantener las desgravaciones fiscales y no declarar el rendimiento obtenido si lo renueva, lo que permite ahorrar impuestos. Si se elige hacerlo a través de cuenta, sí deberá pagarse a Hacienda al finalizar el plazo de cinco años.

Bonos simples.

Normalmente se destinan a los mercados y a inversores con experiencia, aunque algunos bancos ya los están ofreciendo a los particulares. La última que está comercializando el Sabadell ofrece una rentabilidad del 0,65% anual, a un plazo de cuatro años. Aunque parezca baja, son cuatro veces más que lo que pagan los depósitos de media (0,17%)

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats