Ni el «Brexit» ni la incertidumbre política han logrado romper con la tendencia alcista del sector de la construcción en la provincia. Al menos, por el momento. De acuerdo con los últimos datos del Colegio de Aparejadores, hasta el pasado mes de septiembre se había iniciado en Alicante la construcción de 3.866 nuevas viviendas, lo que supone un incremento del 23% sobre las cifras del mismo periodo del ejercicio anterior. De hecho, en tan sólo nueve meses ya se han puesto en marcha prácticamente los mismos inmuebles que en todo el año 2015, lo que apunta hacia una recuperación sólida de la actividad.

Eso sí, hasta la fecha siguen siendo los municipios costeros los que concentran las nuevas promociones, mientras que en el interior apenas se ponen en marcha nuevos proyectos, más allá de alguna casa particular. Es decir, que sigue siendo en exclusiva la demanda de segunda residencia la que tira del mercado, con muy pocas excepciones, mientras la primera residencia sigue estancada o se nutre básicamente de los pisos de segunda mano o de aquellos que quedaron sin vender tras el estallido de la burbuja inmobiliaria.

De esta forma, Orihuela sigue a la cabeza de los municipios con mayor número de visados para la construcción de nuevas viviendas de toda la provincia, con un total de 723 entre enero y septiembre, aunque retrocede ligeramente con respecto a las cifras del año pasado. En concreto, un 4,9%, según los registros de los Aparejadores. Sin embargo, este descenso se ve más que compensado con el repunte del 35% que experimenta la vecina Torrevieja, donde se iniciaron hasta 555 nuevas casas, en 32 promociones diferentes. Una cifra que no debe extrañar si se tiene en cuenta que las ciudad de las salinas es una de las que mayor número de transacciones registra, lo que significa que existe una importante demanda en la zona, sobre todo internacional.

El salto de la capital

Pero este año el gran salto se ha producido en la capital de la provincia, donde las solicitudes de permisos para edificar se han disparado un 150% y ya suman 478, según las mismas fuentes. En este caso, la mayoría de los nuevos proyectos se ubican en el entorno de la Playa de San Juan, donde se combina la demanda de viviendas turísticas, con la de primera residencia de alto nivel. Aún así, también se han puesto en marcha varias promociones en el centro.

Por detrás de la capital se sitúan Benidorm, con 322 visados; Xàbia, con 241; Pilar de la Horadada, con 234; Algorfa-Benejúzar, con 124; Guardamar, con 125; Calp, con 122; y Elche, con 115. En este caso hay que tener en cuenta que las promociones en marcha en Arenales del Sol ya solicitaron en su día todas las licencias, por lo que no aparecen reflejadas.

«De momento, lo que vemos es que en la costa sigue aumentando la tramitación de visados para la construcción de nuevas viviendas, a pesar del «Brexit» o de la falta de Gobierno que, según creemos, sí que ha afectado algo más a los proyectos de rehabilitación», explica el presidente de Coaateia, Gregorio Alemañ. En su opinión, parte de esta resistencia que parece mostrar el sector se debe al regreso del pequeño inversor, que vuelve a ver el ladrillo como una alternativa para sus ahorros.