El presidente de Baleària, Adolfo Utor, tampoco se olvidó ayer de poner de relieve el importante déficit de infraestructuras que sufre la provincia y que también contribuye a la falta de cohesión territorial de la que, a su juicio, adolece Alicante. Entre ellos destacó «la imperiosa necesidad de que se ponga en marcha el Corredor Mediterráneo para dar salida hacia Europa a nuestra economía».

Al respecto, recordó que la capacidad exportadora es una de las grandes bazas de la provincia, donde más de 8.000 firmas realizaron algún negocio con el exterior durante el año pasado. Sin embargo, destacó «que existe un problema muy real que es la saturación de las carreteras del sur de Europa por las que ahora circulan esas mercancías», por lo que se necesita poner con urgencia esta alternativa ferroviaria.

Y si los exportadores necesitan el Corredor Mediterráneo, el sector turístico hace ya años que reclama el tren de la costa desde Valencia hasta Alicante, que también calificó de «fundamental». Utor señaló que, actualmente, «cuesta más venir desde Dénia hasta Alicante, que hacerlo desde Valencia», lo que consideró un sinsentido. Sin embargo, lamentó que en Alicante «se oyen pocas voces reclamándolo», lo que puso como ejemplo de la falta de colaboración entre ciudades en la provincia que fue la base de su intervención.

Utor tampoco se olvidó de poner de relieve la necesidad «de garantizar un suministro suficiente y de calidad de agua», aunque reconoció que no tenía una solución clara para este problema.

Papel clave del puerto

El naviero también reivindicó el papel que, en su opinión, debe jugar el Puerto de Alicante como «dinamizador de la economía provincial». En concreto, señaló que debe convertirse en la «puerta al Norte de África», una zona «llena de oportunidades», en la que la propia Baleària tiene intención de crecer. En este sentido, señaló que el ferri actual no es suficiente para este fin y que Alicante debe convertirse en un puente para mercancías de carga rodada (cuando son los camiones los que embarcan y no sólo los contenedores).

Como es lógico, en el turno de preguntas uno de los asistentes quiso saber los motivos por los que Baleària ha elegido el Puerto de Valencia para su primera conexión con Argelia, en lugar de hacerlo desde Alicante, donde no opera ninguna línea. Utor señaló que lleva «seis o siete años intentando establecer esa conexión desde Alicante» pero el problema es que el Gobierno argelino lo rechaza para no hacerle competencia a la compañía estatal que gestiona el actual ferri.

Y sobre el hecho de que no tenga ninguna línea desde la capital de la provincia, reivindicó que Dénia también es un puerto alicantino y que la compañía que preside ha logrado convertirlo en el principal embarcadero de pasajeros de la C0munidad, arrebatando a Valencia miles de clientes. Además, también reivindicó la importancia histórica del puerto dianense desde la época romana.

Por otra parte, preguntado por si sería partidario de fusionar la Universidad de Alicante y la Miguel Hernández para tener una única institución académica en la provincia, el empresario no quiso pronunciarse sobre este caso concreto pero sí señaló que «habría que contar con menos universidades pero mejores». También lamentó la desconexión que existe entre el tejido productivo y estas instituciones, al igual que también ocurre con los institutos tecnológicos y otros centro de innovación, y abogó por aumentar la colaboración entre todos.