La patronal alicantina es un suma y sigue de escándalos. En concurso de acreedores y denunciada por la Generalitat por supuesta duplicación de facturas, las irregularidades en la gestión en esta organización no cesan. Ahora es la federación del metal Fempa, principal azote de la cúpula patronal alicantina en los últimos años, la que está en el ojo del huracán. El caso es tal como sigue.

Fempa acudió este año a una convocatoria del Servef para cursos de formación ocupacional de libre concurrencia por una cantidad de aproximadamente un millón de euros. Uno de los criterios de evaluación que puntuaba para ser adjudicataria de la subvención era tener en su plantilla un número determinado de discapacitados, personas en riesgo de exclusión o mujeres víctimas de la violencia de género.

La federación alicantina del metal presentó su solicitud el 2 de febrero pasado. Como el Servef observó que cuatro de las cinco personas acreditadas habían sido contratadas el 1 de febrero, hizo sus indagaciones y comprobó que las mismas fueron despedidas dos días después.

En vista de esta situación, la Conselleria de Economía Sostenible pidió un informe a la Abogacía de la Generalitat para determinar si debía «denegar una subvención a quien cumple los requisitos para resultar beneficiario pero ha falseado las condiciones para la baremación».

La respuesta de la Abogacía es concluyente: «Si consideramos que Fempa ha incurrido en el falseamiento de condiciones para obtener la subvención, parece lógico que si el falseamiento se detecta con carácter previo a la concesión de la subvención, este actúe como causa de denegación, pues no tiene sentido conceder para luego solicitar el reintegro con el consiguiente perjuicio de terceros». Además, en su informe de julio de 2016, concluye que «procedería poner los hechos en conocimiento de la Inspección de Trabajo para las actuaciones oportunas».

La federación del metal es desde hace años, junto a la Cepyme de Cristóbal Navarro, la gran opositora de la cúpula dirigente de Coepa. Fempa consideró que la organización provincial falseó entre 2006 y 2010 sus beneficios y presentó una demanda ante los juzgados de Alicante que en 2013 le dieron la razón.

El pasado mes de abril, el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana anuló parte de los estatutos de Coepa a instancias de Fempa, que presentó un recurso contra el artículo de los mismos que permitían la afiliación directa de empresas.

El miércoles, tras conocerse la querella de la Generalitat contra Coepa, el presidente de Fempa, Guillermo Moreno, abogó por disolver la patronal provincial alicantina y justificó su postura por las irregularidades que acumula esta última. Moreno es partidario de escuchar propuestas de la autonómica Cierval y la Generalitat para poner en marcha una alternativa a Coepa.