El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, trasladó ayer a directivos de Ford en España y Europa su voluntad e interés por «minimizar el impacto laboral» de los 430 despidos que se prevén en la planta de Almussafes (Valencia). El encuentro estaba previsto antes de que el martes, la automovilística anunciara el ajuste laboral. Generalitat y Ford acordaron crear una comisión de trabajo conjunta y permanente para tratar asuntos en materia de infraestructuras y formación.