Según la última memora del Consell Econòmic i Social (CES), el sector pesquero de la Comunitat Valenciana movió durante 2015 un total de 84,8 millones de euros en volumen de capturas, que caen un 20,2 % respecto al ejercicio 2014.

A pesar de la importancia adquirida por esta actividad pesquera en 2015, se registró un descenso del 4,2 % en producción respecto de 2014, que ha repercutido en su valor (un 1,1 % menor). Así, el ejercicio 2015 cerró con una producción de 13.808 toneladas con un importe de 64,57 millones de euros.

El mismo informe señala que frente al descenso en pesca marítima destaca el auge de la acuicultura, que supuso un volumen de negocio cercano a los 65 millones de euros el año pasado.

La flota pesquera valenciana, integrada por 555 barcos y que emplea a más de 2.000 tripulantes, a Alicante a la cabeza en el número de criaderos con 16 de las 27 granjas marinas autorizadas en 2015 en la Comunitat Valenciana, seguida de Valencia con 4 y Castellón con 4.

El volumen de capturas se situó el año pasado en 21.564 toneladas, lo que supone un descenso del 20,2 % respecto de 2014, con un valor en lonja de 84,8 millones de euros, un 11,6 % inferior. A la "grave situación" del sector pesquero se suman otros factores como "la contaminación de las aguas, la escasez de precipitaciones y el cada vez menor volumen de pescados de alto valor comercial".

La memoria del CES destaca, no obstante, el auge de la acuicultura, "tanto por el volumen de producción como por el de instalaciones autorizadas, que constituye un complemento adicional a la pesca extractiva tradicional".

La reducción tanto en tonelaje como en valor de las capturas es una tendencia "que viene constatándose desde hace varios años", según recoge la Memoria.

El CES atribuye esta situación a la política pesquera "impuesta desde Bruselas" para la adaptación de los recursos sostenibles, con la consiguiente "reducción del número y tamaño de los buques".