Las promotoras y las empresas en liquidación vuelven a copar el listado de los alicantinos que aparecen en la relación de morosos que acaba de publicar, por segunda vez, la Agencia Tributaria y que, en esta ocasión recoge, a todas aquellas sociedades y particulares que el pasado 31 de diciembre debían más de un millón de euros a las arcas públicas. Entre las novedades con relación a la publicada hace seis meses destaca la incorporación del Elche Club de Fútbol, que se encuentra en concurso de acreedores y en manos del Instituto Valenciano de Finanzas, y que aparece en la lista con una deuda de 9,4 millones de euros.

No es el único club deportivo de la provincia que sale en este documento ya que el Lucentum Baloncesto Alicante S.A.D. -ya transformado en fundación- repite en la misma, aunque con una deuda de sólo 1,1 millones frente a los 2,7 que constaban en la anterior. El que ya no aparece es el Alicante Club de Fútbol, que en junio del año pasado constaba con un importe pendiente de 1,9 millones de euros.

En el terreno empresarial vuelven a ser las promotoras las más numerosas. Así, destaca la deuda de 24 millones que ya acumula la firma Residencial Mira Llevant del promotor ilicitano Ramón Salvador, investigado en varias causas judiciales por sus negocios con Bancaja y Banco de Valencia. Una deuda que casi se ha duplicado en los seis meses transcurridos entre la publicación de la primera y la segunda lista, ya que entonces Hacienda ¨"sólo" le reclamaba 13,3 millones.

También repite el expresidente y todavía miembro de la directiva del Hércules Valentín Botella. Su firma Procumasa sigue debiendo 1,7 millones al fisco, la misma cantidad que el semestre anterior.

Igualmente, vuelven a aparecer dos de las empresas del Grupo Santa Ana, del que fuera presidente del Alicante Club de Fútbol, Juan Antonio Iniesta. En concreto, Consorcio de Promoción y Viviendas de Alicante eleva su deuda de 4,5 a 7,1 millones mientras que Dénia 76 Gestión Empresarial mantiene su deuda de 4,9 millones de euros.

En la lista también consta la extinta Radio Televisión Valenciana, con una deuda de 1,3 millones de euros.