El actual monopolio de facto de que disfrutan los casinos en la Comunidad Valenciana -existe un único operador por provincia- puede tener los días contados. La secretaria autonómica de Hacienda, Clara Ferrando, anunció ayer la redacción de una nueva Ley del Juego para posibilitar la entrada de nuevos competidores y evitar que se pierdan posibles inversiones por la rigidez de la legislación actual. Además, el ejecutivo autonómico aprovechará también para desarrollar una normativa propia sobre juego «online», una actividad que en estos momentos sólo se rige por leyes y reglamentos estatales.

Según explican fuentes de Hacienda, el objetivo no es implantar la barra libre para que cualquier interesado pueda abrir un casino en el futuro, pero sí acabar con lo que se considera unas restricciones excesivas, que no existen en otras comunidades autónomas. El quid de la cuestión está en el número de salas apéndice que el anterior Consell del PP concedió a cada uno de los operadores actuales -el Gran Casino de Castellón, Cirsa en Valencia y el Casino Mediterráneo (Acrismatic) en Alicante- que les permite disponer de hasta siete ubicaciones distintas dentro de la provincia. Por ejemplo, el Casino Mediterráneo dispone actualmente de una sala apéndice en Benidorm y otra en Orihuela Costa, además de su sede en el Puerto de Alicante.

El problema es que, mientras no completen ese número de ubicaciones, pueden vetar la entrada de más operadores ya que tienen derecho preferente. Por ejemplo, si una compañía decide instalar ahora un casino en Alcoy, la Generalitat tiene la obligación de ofrecer antes al operador actual la posibilidad de que abra una sala apéndice en esa población y éste tiene hasta dos años para pensárselo antes de contestar. De esta forma, en la práctica los adjudicatarios actuales podrían demorar hasta 14 años la llegada de cualquier nuevo competidor. Desde la Conselleria señalan que en el resto de España lo más habitual es que las concesiones no incluyan ningún apéndice o, como máximo, esta posibilidad se limita a una única sala.

La propia Ferrando aseguró ayer, durante la clausura del certamen Expojoc que se celebró en Valencia, que la decisión de redactar la nueva ley no responde a que en estos momentos tengan ninguna petición sobre la mesa pero consideran conveniente estar preparados.

Proyecto fallido

En realidad, el debate surgió cuando el grupo de Singapur Asian Resorts & Casinos (ARC) planteó la posibilidad de construir una sala en la Marina Real de Valencia, que incluía un gran hotel de seis estrellas y varias inversiones más. Aunque, finalmente, este grupo desistió de sus intenciones, en el Consell quedó patente que habría sido imposible desarrollar el proyecto con la legislación en vigor, por lo que han decidido actualizar la normativa.

De paso, la Generalitat también quiere desarrollar su propia legislación sobre el juego «on line». Actualmente, la regulación de esta actividad es estatal y define incluso dónde deben ubicarse las terminales para realizar las apuestas, de forma que «el juego on line acaba convirtiéndose en presencial». Asimismo, la intención es revisar, a la luz de la experiencia, el régimen sancionador, con el fin de cuantificar más adecuadamente los tipos de multas. También se estudia incidir en las homologaciones de las máquinas, de forma que se equiparen a las del resto de comunidades.