Esgrime la Fundación CAM el «considerable perjuicio económico» que el pago de esos 600.000 euros le ha ocasionado y mantiene que «nos encontramos ante un órgano creado para el cobro ilegal de dietas exorbitadas que el sr. Crespo nunca hubiera podido formalmente cobrar a través de CAM. Se trata de una verdadera apropiación indebida o administración desleal». M. g.