El ministro de Exteriores en funciones, José Manuel García-Margallo, se mostró ayer convencido de que la Comisión Europea entiende que hay que flexibilizar el objetivo de déficit público: «Nadie puede gastar indefinidamente más de lo que ingresa (...) pero no es menos cierto que nos hemos pasado cuatro pueblos en el tema de la austeridad». García-Margallo -que repetirá como candidato del PP por Alicante a las próximas elecciones generales del 26-J- defendió ayer en declaraciones a Antena 3, recogidas por Europa Press, que la Eurozona tiene que analizar por qué crece menos que sus competidores y alertó de que la política monetaria no da más de sí, porque no se pueden bajar más los tipos.

«Es verdad que se puede seguir comprando deuda pública y sobre todo privada para favorecer las inversiones pero la política monetaria está agotada y hay que tirar de política fiscal. Austeridad sí, pero no matando la gallina de los huevos de oro», dijo.

El ministro insistió en que está convencido de que la Comisión Europea es consciente de esa situación y recalcó que España no es el único país que ha pedido una reflexión sobre qué hay que hacer para cumplir los objetivos de crecer y crear empleo y, algo que «empieza a ser vital en España, robustecer y aumentar las clases medias que son las que más han sufrido en la crisis y las que dan estabilidad al país».

El ministro de Economía y Competitividad en funciones, Luis de Guindos, eludió ayer comentar las declaraciones de Margallo por no conocer el «contexto» en que se produjeron, pero sí recalcó la necesidad de «seguir reduciendo» el déficit «a un ritmo adecuado para hacer finanzas públicas sostenibles y para que continúe creciendo la economía», declaró en Bruselas.

Sí hubo reacciones, sin embargo, de representantes de otros partidos políticos. El secretario general del PSOE y candidato a la Presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez, aseguró que las palabras del ministro de Exteriores son tan sólo un motivo más para apoyar el cambio de Gobierno y de políticas tras las próximas elecciones generales, como la reforma laboral, que «recorta» derechos laborales y el resto de medidas aprobadas por el PP que han restringido prestaciones sociales y que «amenazan» las libertades. Y el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, replicó que el Gobierno «se ha pasado cuatro pueblos» no sólo haciendo «recortes», sino también con la corrupción, al «no hacer nada» contra ella, y no queriendo emprender determinadas reformas. Por su parte, el portavoz parlamentario de Izquierda Unida-Unidad Popular, Alberto Garzón, agradeció la «sinceridad» del ministro y replicó que «eso no es pasarse cuatro pueblos, es un saqueo en toda regla».