Yaissel Sánchez se propone liderar en l'Alacantí una UGT en pleno cambio

Óscar Llopis ha decidido no optar a la reelección, tras doce años al frente de la central sindical en l'Alacantí, a la que se afilió en 1978, y donde ha ocupado distintos cargos. Primero fue en la federación del Metal y Construcción (MCA), a la que pertenece y, después, en la ejecutiva provincial (19911-1994), que a partir de este último año pasó a tener estructura comarcal, y que viene liderando desde 2004.

Ahora, el sindicato que dirige desde marzo José María Álvarez, a nivel estatal, tras la renuncia de Cándido Méndez, vuelve a vivir una etapa de cambios. Estos no sólo suponen una reducción de las estructuras territoriales, sino también una fusión de las federaciones, que pasarán de seis a tres.

En los años más duros de la crisis UGT ya vivió una etapa de ajustes para ahorrar costes. Una política que se mantendrá. «Pero el objetivo también es tener mayor funcionalidad y acercar el sindicato a los sectores, a las empresas», subrayaba Óscar Llopis ayer.

El VIII Congreso de UGT-PV inicia a partir de mañana una nueva etapa. Aunque la estructura de las comarcas se mantiene, se elimina la figura de la ejecutiva. Sí habrá un secretario territorial, «al que apoyará un equipo de trabajo en distintas áreas, pero sin responsabilidades orgánicas. Y luego habrá una coordinación del responsable en la comarca y de los tres de las federaciones, una vez fusionadas», explica Llopis. Aún está por determinar el número de personas que formen el equipo de apoyo y la nomenclatura del órgano de coordinación, ya que la unión de los sectores se producirá a posteriori del Congreso. «El objetivo es que todas las organizaciones estén implicadas en las tareas», añadió el secretario general.

Pasado el cónclave ugetista de la Comunidad, el sindicato comenzará a trabajar en la unión de las federaciones. De las tres, una agrupará a todos los servicios públicos, otra aunará los sectores de industria y el agroalimentario y la tercera fusionará el resto de actividades relacionadas con servicios a la ciudadanía.

UGT-PV también ha decidido unificar en este Congreso las elecciones de su líder y los de las comarcas. En el primer caso, hay consenso en las federaciones para que sea Ismael Sáez, de Metal y Construcción (MCA), el que se sitúe al frente del sindicato. Sáez sustituiría a Gonzalo Pino, que deja la dirección de UGT en Valencia para centrarse en la nueva Comisión Ejecutiva Confederal, como secretario de Política Sindical.

También hay consenso para que, en el caso de l'Alacantí-La Marina, sea Yaissel Sánchez la que se ponga a la cabeza del sindicato. Los nuevos requisitos exigen que los secretarios territoriales (seis) tengan el 51% de los avales de los delegados de su comarca que asistan al Congreso. Sánchez tiene un respaldo casi unánime. Cuenta con el apoyo de 12 de los 13 delegados de l'Alacantí-La Marina, porque ella no se ha votado a sí misma. Cumplido este requisito, sólo tendría que lograr el respaldo del 25% del total de delegados del Congreso. Circunstancia que no parece una un obstáculo, dado el apoyo que lleva de su territorio.

Sánchez es cubana de nacimiento y lleva más de diez años afiliada al UGT, donde en los últimos siete años ha formado parte de la ejecutiva comarcal. De 2010 a 2013 fue secretaria de Empleo y Acción Sindical, responsabilidades a las que se sumaron después las de Formación y Prensa. La aspirante a liderar UGT-l'Alacantí ha sido en los últimos años la mano derecha de Llopis, quien considera que su «responsabilidad toca a su fin». A partir de ahora «volveré a mi federación, pero no a liderar nada, sino a apoyar, si ellos consideran que puedo hacerlo».