Alicante cierra el primer trimestre del año con 210.800 parados, que suponen 4.500 más que el trimestre anterior a pesar de la celebración en el mes marzo de la Semana Santa, que suele representar un tirón del empleo en el sector turístico. Con este incremento, la tasa de paro sube ligeramente al pasar del 22,96% de finales de 2015 al 23,62% actual.

De forma paralela, este incremento tiene su repercusión en los datos de ocupación, aunque de forma más agudizada, ya que la provincia ha perdido 10.300 ocupados en los tres primeros meses del año, al situarse el total de alicantinos con empleo en 681.700, frente a los 692.000 del trimestre anterior. En este periodo, sólo la industria ha aumentado el número de ocupados (4.000), mientras que el resto de actividades como la agricultura, la construcción o los servicios han registrado destacados retrocesos. El sector agrícola ha perdido más de 3.000 ocupados y la construcción y los servicios más de 5.000, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).

No obstante, pese a este balance negativo para el empleo provincial en el primer trimestre del año, la comparativa interanual refleja una mejoría tanto del número de parados como de ocupados, equiparándose, además, las cifras. En relación a hace un año, Alicante tiene 25.200 desempleados menos y 24.300 personas con empleo más.

La tasa de paro juvenil ha bajado al 47,7%, 3,9 puntos menos que en el trimestre anterior. El número de viviendas familiares con todos sus integrantes en paro, 83.7000, ha aumentado en 10.800 en relación al trimestre anterior y en 2.300 más que hace un año.

Los hogares alicantinos donde no entran ingresos ha disminuido. Al cierre del mes de marzo eran 40.900 los que se encontraban en esta situación y representan 2.400 menos que el trimestre anterior.