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La construcción repunta otro 20% en la provincia durante todo el primer trimestre

Entre enero y marzo se iniciaron 1.186 viviendas en la demarcación, la cifra más elevada desde el año 2008

El sector del ladrillo consolida su recuperación en la provincia con un nuevo repunte de la actividad durante el primer trimestre del año. Si el pasado ejercicio ya se cerró con un notable aumento del 48% en la construcción de nuevas viviendas en la zona, en lo que va de 2016 se ha constatado otro repunte de más del 20% en la concesión de visados, lo que ya sitúa el volumen de obras en marcha por encima del que se registraba en 2009.

Así lo revelan los últimos datos del Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Alicante (Coaatiea), que destacan, además, que esta recuperación alcanza cada vez a un mayor número de municipios y ya no se centra exclusivamente en la Vega Baja -principalmente, en Orihuela y Torrevieja- como ocurría durante 2015.

De esta forma, entre enero y marzo de este año se iniciaron hasta 1.186 nuevas viviendas frente a las 985 del mismo periodo de 2015, en lo que supone el mejor dato para el sector desde el estallido de la crisis. Un aumento, eso sí, que según los aparejadores tenderá a atenuarse algo a lo largo del año, de forma que el ejercicio finalizará con una 4.400 casas iniciadas, alrededor de un 10% más.

La nueva normalidad

Se trata de una cifra todavía muy alejada de las que experimentó la provincia durante los años del «boom», en que llegaron a iniciarse más de 50.000 casas anuales, pero que, según el presidente de Colegio, Gregorio Alemañ, se estaría aproximando ya a lo que debería ser la nueva normalidad del sector en la zona. Y es que, a su juicio, con el nuevo rumbo que se quiere imprimir a la política urbanística por parte del Consell, una población estancada o en retroceso por la ausencia de nuevas llegadas de inmigrantes y unas previsiones económicas que no apuntan a un nuevo «despegue» de la actividad, las necesidades de nuevos inmuebles de la zona podrían estar cubiertas con apenas 5.000 ó 6.000 nuevas viviendas anuales.

En cualquier caso, lo más importante para el presidente de los aparejadores es que «la tendencia al alza se consolida y cada vez abarca una zona más importante de la provincia». Así, si en los últimos años eran Orihuela y Torrevieja las que encabezaban casi en solitario la clasificación de los municipios con más actividad constructora, en el primer trimestre de este año Benidorm les ha tomado la delantera con la puesta en marcha de tres grandes promociones que suman 267 nuevas viviendas. Orihuela logra resistir en segunda posición, con 191 visados, pero en el tercer lugar se cuela Alicante o, mejor dicho, la playa de San Juan, donde se han iniciado hasta 185 casas en los tres primeros meses del año. Torrevieja cae, así, hasta la cuarta posición, con 130 visados; seguida por Pilar de la Horadada, con 98; y Xàbia, con 32.

Segundas residencias

Donde la construcción sigue sin dar señales de vida es en los municipios del interior, donde las pocos inmuebles que se levantan son viviendas particulares. «De momento, lo que se construye son segundas residencias, básicamente orientadas al mercado internacional porque los extranjeros sí que apuestan por la compra de viviendas en la Costa Blanca», apunta Gregorio Alemany. No obstante, en algunas zonas, como la citada de la Playa de San Juan, son los compradores nacionales los que están adquiriendo esas segundas residencias.

Como apunta el presidente del Colegio, también hay que tener en cuenta la tendencia del sector a un aumento de las rehabilitaciones frente a la construcción de nuevos edificios, una tendencia que irá a más en los próximos años, a medida que las subvenciones apoyen esta actividad. Así, en estos tres primeros meses del año el número de reformas aumentó un 34%, según las cifras que guardan los aparejadores.

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