El suelo vuelve a cotizar en el mercado inmobiliario alicantino. El aumento sostenido de la demanda de viviendas en los municipios costeros y en las grandes ciudades ha provocado que algunos promotores estén a punto de agotar el stock de terrenos que tenían en cartera al estallar la crisis, lo que les ha llevado a buscar nuevas ubicaciones entre los numerosos solares que acumula la banca. Así lo constatan los datos de Solvia, la inmobiliaria propiedad del Banco Sabadell, que durante el año pasado quintuplicó sus ventas de terrenos en la Comunidad Valenciana, principalmente en la provincia de Alicante, donde más ha crecido la demanda de nuevos inmuebles en los últimos años.

En concreto, la compañía dirigida por Javier García del Río formalizó el año pasado hasta 250 operaciones de suelo en la autonomía frente a las 53 que registró en 2014. Todo un cambio de tendencia y un alivio para el Sabadell, que heredó de la CAM millones de metros cuadrados para los que, hasta la fecha, no existían compradores. No en vano, el suelo fue el activo que más valor perdió tras el estallido de la burbuja inmobiliaria -su precio llegó a caer casi un 80% en Alicante, según el Ministerio de Fomento- y el mercado se paralizó.

Ahora los empresarios vuelven a buscar solares aunque, eso sí, sólo en determinadas ubicaciones donde consideran que sus promociones pueden tener salida en estos momentos. Así, la recuperación de la demanda de suelo empezó en la provincia por Orihuela Costa donde, según Solvia, «la bolsa de solares (disponibles) ya se ha reducido considerablemente y los precios de las transacciones se han incrementado». Un aumento que ha provocado que los promotores empiecen a desplazarse hacia el norte en busca de nuevos emplazamientos libres, sobre todo en Finestrat, Dénia, Xàbia, Benidorm o Calp.

Además, también se ha despertado el interés por solares para edificar promociones de entre 40 y 50 viviendas para primera residencia en las dos grandes ciudades de la provincia, Alicante y Elche, siempre que el valor de estos terrenos se ajuste a lo que los clientes están dispuestos a pagar en la actualidad.

En este sentido, aunque en otras partes del país son los fondos de inversión los que están protagonizando la recuperación de este mercado, en Alicante y la Comunidad Valenciana son los promotores locales quienes acaparan la mayoría de las operaciones, según los datos de la inmobiliaria, lo que indica que no son transacciones que buscan acumular terrenos a precio de ganga para venderlos en el futuro, sino que responden a la necesidad de poner en marcha nuevas promociones.

Al respecto, desde Solvia destacan que, a pesar de la crisis, en la provincia aún quedan un buen número de promotores «con capacidad económica y con volumen de ventas en sus proyectos». A estos hay que sumar también los particulares, que también empiezan a adquirir pequeños terrenos para la autopromoción.

Más de 6.000 inmuebles vendidos

Esta mejora en la venta de solares se sumó a la buena marcha del resto de segmentos, lo que permitió a la inmobiliaria propiedad del Sabadell colocar hasta 6.236 inmuebles en la Comunidad Valenciana durante el año pasado, 333 más que en 2014. De ellos, 3.769 fueron viviendas y el resto garajes, suelos y locales. En otro orden de cosas, la compañía ha fichado al antiguo director comercial de la promotora torrevejense TM José Peral como nuevo responsable de su unidad de Comercialización y Marketing.