El fabricante de modelos como el Twingo, el Laguna, el Clio o el Megane está siendo investigado por la «comisión Royal», al igual que el resto de fabricantes automovilísticos de Francia. Ese comité, que toma su nombre de la excandidata presidencial y actual ministra de Ecología, se creó después de que saliera a la luz el caso Volkswagen para despejar dudas sobre la credibilidad de los constructores franceses, un país con una importante tradición industrial automovilística. efe parís