Abengoa solicitó ayer a la banca una línea de liquidez de 450 millones de euros con la que afrontar los pagos corrientes de los próximos cuatro meses, los que durará el preconcurso de acreedores. Fuentes financieras señalaron que esta petición se formalizó durante la reunión celebrada ayer entre ambas partes con el objetivo de marcar los próximos pasos en la negociación que pretende reestructurar la deuda del grupo. En concreto, Abengoa considera que necesita unos 100 millones de aquí a final de año y 350 millones adicionales para el primer trimestre de 2016, un periodo que coincide con el del preconcurso.

Hasta ahora, la banca había vinculado el desbloqueo de esa línea de liquidez a la culminación, por parte de la consultora KPMG, de un estudio detallado de la deuda de la compañía, en el que se especificase qué parte de la deuda es sostenible y qué parte no. Sin embargo, estas fuentes consideran que tendrán que ofrecer parte de esta liquidez en los próximos días para que la empresa efectúe pagos inminentes, fundamentalmente a trabajadores y proveedores, ya que se encuentra en una situación de urgencia.

Varias fuentes señalaron que confían en disponer del mapa detallado de la deuda para la semana que viene y que, una vez que se cuente con esta documentación, KPMG analizará la necesidad real de liquidez de la compañía. A este respecto, fuentes financieras calculan de forma preliminar que la compañía necesita en torno a 80 millones de euros mensuales de liquidez, lo que situaría la cifra en unos 320 millones en los cuatro meses del preconcurso, un dato que en cualquier caso podría modificarse en función del resultado del estudio de la consultora.

Una vez superada esta primera fase de análisis de la deuda y desbloqueo de la liquidez, comenzarán a plantearse las distintas vías para salvar la empresa, que podrían pasar por la venta de activos, quitas o capitalización de deuda.